Este martes, en el puerto de Veracruz, el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares les dio la bienvenida a los 400 elementos de la Policía Militar que han venido a reforzar las labores de seguridad del gobierno del estado, el cual se ha visto rebasado por los grupos delincuenciales.

Lo preocupante es que si con este último apoyo del gobierno federal la administración de Yunes Linares no logra abatir la inseguridad y estabilizar al estado, los veracruzanos ya no tendrían a quién más recurrir.

En un texto que difundió el domingo pasado, el senador priista Héctor Yunes Landa puntualizó que “el gobierno federal no le ha escatimado apoyo alguno a lo que Miguel Ángel Yunes ha solicitado: el Ejército, la Marina, la Policía Federal, la Gendarmería y recientemente la Policía Militar, han sido parte de sus peticiones y todas han sido atendidas; sin embargo, es ya urgente que el gobernador se deje de improvisaciones y que asuma, de una vez, su responsabilidad en materia de seguridad, porque es evidente que el gobierno de Veracruz requiere de profesionales en cada una de las áreas de esta materia”.

Yunes Landa reafirmó que “Veracruz no quiere más excusas ni justificaciones ante el incremento de la inseguridad” sino que “requiere de líneas de acción planeadas concienzudamente”.

El aspirante del PRI a la gubernatura expuso que “el caso de Veracruz llama fuertemente la atención por la gran expectativa que en materia de seguridad generó en campaña el actual gobernador Miguel Ángel Yunes, autodenominado ‘experto en seguridad’; sin embargo, en menos de cuatro meses sólo ha propiciado desencanto ante el incremento de ejecuciones en el estado, que en promedio acontecen cada seis horas, para ubicarse lamentablemente como uno de los estados más sangrientos del país”, pues señaló que durante el mes de marzo, considerado el peor de la historia de la entidad, se contabilizaron 183 ejecutados.

En total, durante los primeros cuatro meses de la presente administración, en Veracruz se han cometido 526 ejecuciones, por lo que “se percibe” que el gobierno de Yunes Linares “es peor al de (Javier) Duarte”, apuntó el legislador priista.

Yunes Landa lamentó la indiferencia del gobernador del PAN “ante el exhorto que oportunamente se le hizo de hacer un alto en el camino, de serenarse y reflexionar, para que compusiera lo que hubiera que componer”, ya que adujo que “la seguridad pública es un tema complejo, multifactorial”.

“Miguel Ángel Yunes está ‘aduartado”, dijo irónico Héctor Yunes, al referir que a escasos días de iniciado su gobierno, el mandatario estatal panista “declaraba que en Veracruz sólo se robaban Coca-colas y 100 pesos; después, que la inseguridad era un problema de percepción ciudadana; luego, recurrió a otra excusa también usada en el anterior gobierno: que las ejecuciones son producto del enfrentamiento entre bandas del crimen organizado”.

Este martes, sin embargo, al darles la bienvenida a los 400 elementos de la Policía Militar que fueron congregados en un evento vistoso realizado en la Gran Plaza Malecón del puerto de Veracruz, Yunes Linares destacó que a 132 días de haber iniciado esta tarea, “hoy le digo a los veracruzanos nuevamente que vamos a recuperar las condiciones de seguridad y hoy se los digo con más certeza, desde esta plaza.”

Ojalá que así sea, porque si con todo el apoyo de las fuerzas federales este “experto en seguridad” no logra avanzar en el apaciguamiento y estabilización de la entidad, ¿a quién más podrían recurrir los veracruzanos para que protejan sus vidas, familias y patrimonio? Sólo les quedaría invocar al “Chapulín Colorado”.


DOÑA LORENA, FIRME


Este martes, en Xalapa, corrió el rumor de que la delegada del CEN del PRI, Lorena Martínez, se habría trasladado a la Ciudad de México para presentar su renuncia al cargo partidista.

Sin embargo, por la tarde, Martínez desmintió la versión. A través de su cuenta de Twitter, la excandidata a la gubernatura de Aguascalientes informó que “efectivamente me encuentro en la Cd de México pero trabajando a favor del PRI de Veracruz! Vamos a darle con todo!”.

Lo cierto es que inicialmente el rumor de que la delegada priista estaba por tirar el arpa no sorprendió a muchos. Y es que no sólo ha abierto demasiados frentes sino que también se le ha complicado lograr consensos con las diversas tribus priistas y los aspirantes a las principales alcaldías, los cuales buscan asegurar las primeras regidurías en las planillas municipales por considerarlas las posiciones más seguras ante el adverso panorama electoral por el descrédito y repudio popular que carga el partido tricolor derivado de la desastrosa administración del exgobernador Javier Duarte.

El desgarriate de los priistas en este proceso electoral es tal que en varios municipios aún no tienen candidatos definidos, y se les está dificultando cumplir con el requisito de equidad de género que exige la ley. En el puerto de Veracruz tumbaron la candidatura externa del panista Francisco Ávila Camberos, y ahora pretenden postular al diputado federal de Orizaba con licencia, Fidel Kuri Grajales, a quien originalmente perfilaban por Boca del Río, pero el ayuntamiento boqueño en poder del PAN le negó al propietario de Los Tiburones Rojos la constancia de residencia.

Además, las intrigas y golpes bajos llegaron a cierto extremo que hace una semana Francisco Mora Domínguez también habría renunciado como presidente de la Comisión Estatal para la Postulación de Candidatos.

El último desacierto de doña Lorena fue maniobrar para que su amiga Elízabeth Morales, a quien hace dos años le asignó la representación de la PROFECO en Veracruz, fuera promovida a la Delegación estatal del ISSSTE que hasta finales de enero pasado estuvo a cargo de Renato Alarcón Guevara, y a la que presuntamente planeaba retornar el actual presidente del CDE del PRI después del proceso electoral de junio próximo.

________________________________________________________________________________________________
LOS CONTENIDOS, ESTRUCTURA Y REDACCIÓN DE LAS COLUMNAS SE PUBLICAN TAL CUAL NO LAS HACEN LLEGAR SUS AUTORES.