Las redes sociales son el juicio de la historia en tiempo real
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Ayer, al inaugurar la ampliación del Arco Norte, el presidente Peña soltó la siguiente perlita:

“Lo que permitirá realmente que México siga creciendo, siga siendo atractivo a la inversión como lo dicen hoy los distintos analistas externos al País que se olvidan de lo que se dice o de los señalamientos o de lo que se dice a veces en las redes sociales, que a veces son muy irritantes y a veces les gusta hacer señalamientos muy duros y muy lapidarios y que poco recogen de los logros y de los avances que hemos tenido como nación.”

Por lo visto, el mandatario mexicano tiene severos problemas para aceptar la divergencia.

Resulta que están plenamente documentadas las millonadas que gasta el gobierno federal, para obtener comentarios amigables de los grandes consorcios de la comunicación, que siempre callan o matizan los graves problemas del país.

Además, hay evidencia de las campañas de linchamiento mediático financiadas por el sistema, en contra de sus adversarios. En este caso, si se vale ser duros y lapidarios.

Pero no conforme, Peña quiere que los usuarios de las redes sociales halaguen sus ‘grandes logros’, para así cerrar el ciclo virtuoso de la narrativa oficial…sin comentarios.


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