El día de hoy le quiero hacer una pregunta, ¿Cuántas veces ha escuchado o Usted mismo ha dicho “Ya estamos hasta la madre de los partidos políticos, todos son iguales”?
Hoy que en la boleta electoral hay un nuevo participante, la comentocracia se ha dado vida descalificando su llegada y ha cuestionado como nunca antes a un candidato presidencial.
La llegada de El Bronco a la boleta está manchada por la trampa y el recelo de un pacto en lo oscurito perpetrado al más alto nivel. Pero, sin exonerarlo, ¿Conoce Usted algún partido que sea completamente democrático, transparente y honesto?
A menos que la propia FEPADE determine que hubo delitos reales y al final lo bajen de la boleta, el Bronco arranca con 10 días menos para cambiar la historia de México.
Hoy mismo lanzó un video con el hashtag #ProhibidoRendirse.
Su oratoria es burda, de rancho, norteño, con ademanes hoscos, pero sus palabras -para muchos- están cargadas de razón.
Cuando el Bronco compitió para gobernador de Nuevo León comenzó en el piso de las encuestas, con un similar 2% que tiene hoy… y al final ganó.
Y no ganó porque haya sido el mejor, ni porque sus propuestas hayan sido inmejorables, ganó porque Nuevo León estaba uptudimóder de la clase política tradicional: del rancio PRI, del sectario PAN, del inocuo PRD, y si hubiera competido MORENA, hasta de ese inenarrable neopartido.
En Nuevo León ganó, como él lo afirma, “contra todos los partidos, con todo su poder, con todas las reglas a su favor, con todo su dinero, con todos sus gobiernos, con todas sus estructuras y todas las encuestas”.
Este primero de julio la historia no es distinta. Su misión es varios escalones arriba de lo imposible. Aún así saca el pecho y cuando menos le puedo asegurar que le pondrá un poco de picante a esta aburrida campaña presidencial que nada más no cuaja.
Llevamos diez días de campañas presidenciables tirados a la basura.
Hasta ahora todo ha sido puro bla bla de la mayoría de los candidatos a la Presidencia. Hay pocas propuestas razonables… y aunque propuestas hay muchas, la mayoría no son más que puros onanismos mentales e ideas agarramensos que buscan atrapar a quien esté más en la pentonta.
La mayoría ofrece empleos, seguridad, abatir la corrupción y desarrollo; que lo hacen por el “exagerado amor” que tienen por México, por esa “vocación de servicio” que los mueve a entregarse desinteresadamente; que ahora sí viene lo bueno y que con ellos se acabará todo el hato de corrupción antes vivido. Pero exactamente eso también ofrecieron Peña Nieto, Felipe Calderón, Vicente Fox, Ernesto Zedillo, Carlos Salinas, Miguel de la Madrid, y una enorme caterva de buenos para nada a los que aún seguimos manteniendo.
Margarita Zavala y El Bronco entraron a la boleta “haiga sido como haiga sido”, con las mismas tranzas y chapucerías que han ocupado durante décadas todos los partidos políticos y los seguimos manteniendo con miles de millones de pesos, ¡Y mire cómo está el país!
¿Tiene probabilidades el Bronco? En tres meses le digo. Pero de lo que sí estoy seguro es que le va a poner sabor a este aguado caldo, mal llamado campaña presidencial.
¿Realmente está hasta el copete de los partidos políticos? ¡Demuéstrelo!



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