Algunos diputados panistas, en específico el cuenqueño Francisco Lara Arano, dicen querer “platicar” con quien se vislumbra como el próximo procurador de Veracruz, el diputado federal con licencia Felipe Amadeo Flores Espinosa, para ver si está en la sintonía de “limpiar” la procuraduría y la Agencia Veracruzana de Investigación.
Esa confirmación que quieren, será reiterar algo que el próximo procurador deberá impulsar con fuerza, pero no como un “quítate tú para poner a mis cuates”, sino como una tarea que incluye el hacer que todos los que laboran en esa instancia (hasta el personal de limpieza) presenten los exámenes de confianza y confiabilidad para estar en un puesto de seguridad pública, esos en los que el secretario de Gobernación, José Francisco Blake Mora, dijo que Veracruz está muy rezagado.
Cierto que su nombramiento debe ser aprobado por el Congreso local, pero eso no implica tampoco que el nuevo procurador deba establecer compromisos políticos con los diputados, porque su compromiso debe estar con los terrenales que reclaman justicia, incluso más allá del compromiso que debe tener con el gran místico que lo propone.
Felipe Amadeo conoce el trabajo policiaco, porque en los inicios de su carrera fue agente del Ministerio Público y luego subjefe de Averiguaciones Previas de la Procuraduría General de Justicia; durante el gobierno de Agustín Acosta Lagunes fue director general de Seguridad Pública, de 1982 a 1984, y luego secretario general de Gobierno, de 1984 a 1986, cuando le tocó enfrentar a diversos grupos caciquiles y delincuenciales que actuaban en el estado, entre ellos Cirilo Vázquez en el sur, Felipe Lagunes en el centro y Toribio Gargallo en la región de Córdoba.
En ese entonces, el hoy difunto Miguel Ángel López Velasco le nombraba “Amadreo”, porque decía que eso era lo que hacía con los delincuentes y enemigos políticos del régimen, madrearlos.
Amadeo Flores buscó ser gobernador del estado en diversos momentos, sin lograrlo, pero al ver que su estrella política decaía fundó la Vía Veracruzana, grupo en el que se aglutinaron diversos políticos que iban siendo dejados de lado por los nuevos actores que arribaban a la escena.
Cuando Fidel Herrera obtiene la gubernatura, deja fuera de los puestos a Felipe Amadeo y lo mantiene así hasta que en diciembre de 2006, en una comida de fin de año de Vía Veracruzana, anuncia que lo incluirá en su gabinete, como una forma de mantener una esperanza colectiva para todos los que no habían sido incluidos en su gobierno y que estaban ahí.
Así pues, lo nombra secretario ejecutivo del Consejo Estatal de Seguridad Pública el 12 de diciembre de ese 2006, cargo que deja en diciembre de 2008.
Ahí sí llegó aplicando la barredora total con todo el personal que tenía su antecesora, Clara Luz Prieto Villegas, al asumir que la posición era un pago político.
Vía Veracruzana fue también su máquina de trabajo durante la campaña de Javier Duarte a la gubernatura del estado, y con esa nominación realizó varias alianzas, entre éstas una con Alejandro Montano Guzmán, quien durante el sexenio anterior estuvo prácticamente fuera de los cargos políticos.
Vía Veracruzana sirvió para impulsar la llegada de quien fue su presidente (¿o se mantiene en el cargo?), Miguel Ángel Díaz Pedroza, como secretario técnico del Instituto Veracruzano de Acceso a la Información.
Igualmente Vía Veracruzana apoyó la designación de Alejandro Montano como presidente del comité estatal de la CNOP, lo que implica también el tejido o mantenimiento de las redes con el diputado local Flavino Ríos Alvarado (quien fue secretario de gobierno con Miguel Alemán, precisamente con el apoyo de Montano).
Flavino Ríos es el presidente de la Comisión de Justicia y Puntos Constitucionales de la Legislatura local y es justamente a quien le toca armar el dictamen mediante el cual se presenta a los diputados la propuesta como procurador de Felipe Amadeo Flores Espinosa.
De hecho existen versiones de que Flavino Ríos fue uno de los consultados en torno a los nombres de quien podría ocupar el cargo.

Así pues, el nombramiento
de Amadeo Flores como
procurador parece estar listo.
De llegar, el tiempo dirá si era
el místico indicado para ocupar
el puesto.


Entonces, las redes de los místicos de la política venidos de anteriores generaciones rinden frutos ante la carencia de nuevos y eficaces cuadros.
En 2008, Felipe Amadeo deja el Consejo Estatal de Seguridad Pública presionado, para esperar la posibilidad de ser nominado candidato a diputado federal por el distrito de Huatusco.
La perspectiva era que debía perder la elección, para que la curul la obtuviese Ulises Ochoa Valdivia, hijo del dirigente nacional del SNTE, Rafael Ochoa, quien iba como candidato del Partido Nueva Alianza.
Incluso se dejó correr la versión, sobre las 6 de la tarde del domingo de la elección, de que ya había perdido. Los rumores decían que desde Palacio de Gobierno alguien le habló para decirle que ya reconociera la derrota.
Finalmente obtuvo el triunfo y Ulises Ochoa reclamó airadamente que le habían hecho fraude.
Flores Espinosa, durante su estancia como diputado, presumió que Beatriz Paredes lo presentaba como el diputado que le ganó a Elba Esther Gordillo, por ese triunfo.
Hoy Ulises Ochoa es diputado plurinominal en el Congreso de Veracruz, por Nueva Alianza, partido que se ha mostrado, exactamente, como aliado del PRI en diversos temas camarales. ¿Cómo se comportará ahora el místico legislador del Panal?
Quizá Jorge Carvallo tenga que hacer algo de trabajo de cabildeo para suavizar situaciones, ¿o ya estará todo planchado?
De ocupar esa curul federal, exactamente, es para lo que pidió licencia el martes 11 de octubre.
Por cierto, su lugar lo ocupará Frida Celeste Rosas Peralta, esposa del dirigente del Sindicato Nacional Azucarero, quien acumuló múltiples reclamos en su periodo como dirigente del Frente Juvenil Revolucionario (FJR). A la neodiputada la identifican como una de las “promesas” de la Fidelidad, e incluso le atribuyen haber obtenido tal soberbia que desairó eventos encabezados por la señora Karime Macías, ¿es real?
Por cierto, sería conveniente que antes de asumir el cargo ponga en orden su salida del FJR y saque las manos de su sucesión, porque está creando turbulencias innecesarias que después se le pueden revertir por el tipo de contrincantes que se está creando.
Así pues, el nombramiento de Amadeo Flores como procurador parece estar listo.
De llegar, el tiempo dirá si era el místico indicado para ocupar el puesto.