Finalmente, lo que tenía que pasar pasó: El recorte presupuestal federal de 125 mil millones de pesos al gasto público impactó severamente en las finanzas estatales.
Habría que agregar el adeudo que según el Senador MANUEL BARTLET tiene Veracruz y que asciende al 117 por ciento de SUS PARTICIPACIONES. Ocupando el séptimo lugar entre las entidades mayormente endeudadas.
Se atribuye – y eso ya al presente importa lo menos- a los apapachos monetarios foxianos a Fidel, brindándole préstamos y obras a cuenta, con el único motivo de lograr el voto veracruzano para la sucesión en favor del otro panista. Lo cual no sucedió ni sucedería, pues Fidel es rojo hasta el hueso.
“Haiga como haiga sido”, el caso es que a JAVIER DUARTE DE OCHOA le ha tocado bailar con la más fea y solamente a base de imaginación y escrupuloso control de partidas ha logrado mantener el barco no solamente a flote sino aún con repercusiones muy bien logradas a nivel nacional e internacional, con lo que apenas antier se anunciaría que Veracruz conserva un muy buen nivel – en referencia a los demás estados del país- en lo que a oportunidades laborales y salarios se refiere.
ASÍ PUES, SE ANUNCIAN 10 medidas de responsabilidad para aplicar los recursos de la mejor manera.
Presentadas como un PLAN DE AHORRO presupuestario que incluye una profunda reingeniería en la administración para fortalecer ingresos propios y reducir el gasto, en beneficio de los veracruzanos, evitando llegar al despido de la burocracia al servicio del estado, se considera:
Primeramente, transformar la operatividad de organismos públicos descentralizados a efecto de hacerlos más eficientes.
Eficientar la operación de estructuras administrativas, evitando duplicidades y manteniendo un control estricto de la nómina.
Revisar compatibilidades laborales evitando que personal de servicio público cobre en dos o más lugares.
Reducción de pagos por rentas de espacios administrativos.
Reducir el número de asesores y personal de apoyo.
Prohibición a mandos medios de uso de seguridad personal.
Creación de una Comisión de Gasto Financiero que vigile la aplicación estricta de estas medidas.
Todo ello, dijo el Gobernador: Con el propósito de mantener el orden, eficacia y las finanzas sanas a que se comprometió el actual gobierno estatal desde el principio de su mandato.
Con lo que el consuelo que nos queda es que AÚN NO ES esto LO PEOR.



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