Mientras los magistrados de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de debaten entre sí aprobar el consumo de la mariguana o no para fines lúdicos, los veracruzanos, nos sorprendemos cada día más del nivel de corrupción y de ilegalidad con la que se conducen nuestros gobernantes.
La propuesta del magistrado Arturo Zaldívar para autorizar el consumo de marihuana a raíz de un amparo presentado por integrantes de la Sociedad Mexicana de Autoconsumo Responsable y Tolerante (SMART) comienza a gestar un serio dilema social.
Afirman expertos que legalizar las actividades relacionadas con el autoconsumo de marihuana, como el cultivo, preparación, posesión y transporte de marihuana para uso personal, excluyendo cualquier uso comercial, permitiría atajar de golpe con el problema que se gesta por mantenerla en la ilegalidad.
De esta manera se ataja el problema que gesta la fijación de precios -la cual desaparecería-, el control sobre el mercado. Pero en esencia crecerá un fenómeno mayor de salud pública, que se verá reflejado en el volumen de adictos que se engancharan.
Por otra parte su aprobación y uso para fines medicinales, es y debe ser autorizado para algunos padecimientos pues permite mejorar la condición de los pacientes, siempre claro esté bajo la supervisión de un médico experto.
Pero regresando a Veracruz, y a los niveles de corrupción, sorprende, tan solo el diputado local panista Julen Rementería del Puerto sostiene que el adeudo que ya mantiene el Gobierno del Estado no disminuye, “sino que se incrementa a 31 mil 950 millones de pesos de los que se pagaran 20 mil millones de pesos, lo que deja un incremento en el saldo de 11 mil millones de pesos y que no se saben cuál será su destino”.
Se desconoce lamentablemente cuales serán las tasas de interés, los plazos de pago y a que banco se le pedirá el préstamo.
La falta de un análisis formal y comprometido de austeridad que funcione para dejar condiciones económicas estables a las siguientes administraciones, se les está atando las manos a los que lleguen, advierte el legislador porteño.
Rementería del Puerto, quien es integrante de la Comisión de Hacienda de la Legislatura local ha detallado que no existe una correlación la deuda en 2004 que registraba la cantidad de 3 mil 800 millones de pesos (mdp), y la deuda que hoy se reconoce por cerca de 43 mil 700 mdp.
La corrupción engendrada a lo largo de la presente administración ha producido un efecto narcótico entre los mismos integrantes de la administración estatal, los cuales, simplemente visualizan lo que no es real, producto de esta adicción y proclividad a realizar actos al margen de la ley en el manejo del recurso público.
Los niveles de desarrollo y el mejoramiento de las condiciones de vida son también un factor para medir los efectos, de esta adicción a la corrupción y al saqueo. Mientras para el gobierno estatal, todo ha mejorado, para los ciudadanos de a pie, en los hechos no existe nada absolutamente nada de mejoría.
Ejemplo de está narcótica visión gubernamental la da el mismo legislador refirió que cuando fungió como alcalde contrato un crédito de 200 mdp, a través de Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), para pagarlo en un lapso de 10 años con una tasa de interés baja y con el cual se realizaron obras.
El legislador panista precisó que al término de su mandato el dejó liquidado el crédito y en caja $202, 812, 2015.69, que la siguiente administración utilizó de la forma que mejor le pareció.
En cambio la presente administración, ve que en endeudar mas a Veracruz se están haciendo las cosas bien, aun cuando no deje ni un centavo.
SEXTANTE
Bien por el presidente municipal de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez y las acciones para incorporar al ayuntamiento la cultura de Datos Abiertos, hasta el presidente Enrique Peña Nieto le reconoce el esfuerzo. A ver si el gobierno estatal aprende algo de esta buena medida, porque en eso de practicar la opacidad se pintan solos.
Al tiempo.

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