Continúa en máxima plenitud el espectáculo de entretenimiento y diversión chismorreica que Veracruz brinda a todo México y hasta a nivel internacional. Sí. Como teórico-conspirativo se me ocurre que hasta pudiese tratarse de una exótica estrategia del secretario de Turismo Harry Grappa Guzmán para promocionar nuestro bello estado, pues desde que fue tomado el Palacio de Gobierno en Xalapa por alcaldes perredistas y panistas ahora transfigurados en vulgares alborotadores al estilo de ayotzinapos y “maestros” centecistas, la entidad es nombrada como encabezado de todos los noticieros de radio y televisión, en todas las primeras planas de los periódicos impresos, desde Mérida hasta Tijuana, desde Acapulco hasta Matamoros, en el ex Distrito Federal (CDMX) y la pandemia se ha extendido hasta más allá de nuestras fronteras.
Es solo afán de protagonismo de los opositores y ahora tomadores de inmuebles ediles, porque saben que si no hay dinero es simplemente eso: NO HAY DINERO. Dónde haya quedado éste es ya otro cantar que se está investigando.
El reclamo de los presidentes municipales es justo, sin duda. Habría, empero, que ver si es tan justo el bloquear el Palacio e impedir la entrada y salida de personal de limpieza, secretarias, auxiliares administrativos, asesores y funcionarios incluido el gobernador Flavino. Peor aún: aunque luego lo dejaron ir, los susodichos alcaldes reclamantes y protestantes cometieron el delito de Privación Ilegal de la Libertad contra el secretario de Finanzas y Planeación, y quienes incurrieron en ese delito están perfectamente identificados (todos son alcaldes, para acabar). Sé que en la situación en que se encuentra en el ámbito político, económico y social el estado de Veracruz, el señor Gómez Pelegrín no va a tener ánimos para meter la denuncia, pero el hecho ahí está.
Ya el gobierno federal anunció, a través del secretario de Hacienda José Antonio Meade, que NO va a venir al rescate financiero de la entidad. Argumentan que sería muy mal mensaje para otros gobiernos estatales el que perciban que pueden tener graves anomalías, que ahí está papá gobierno federal para subsidiarlos. Es inteligible, se entiende. Sin embargo, pienso, el gobierno federal debería hacer alarde de un poco de misericordia, y pensar que algunos a los que el gobierno del estado les debe son, por ejemplo, jubilados y pensionados, a los que la falta del pago los golpea directamente en el estómago y en la salud. No se trata de tener que privarse temporalmente de un buen corte de carne de res o de una suculenta y deliciosa hamburguesa, sino que no tienen ni para frijoles, arroz y tortillas del día anterior.
El gobierno federal no tiene por qué cubrir los desórdenes y desfalcos en las finanzas de los gobiernos de los estados; es lo justo. Pero – reitero – la misericordia es ir más allá de la justicia. Hay quienes requieren el dinero que el gobierno les debe sólo para mantener equilibradas sus finanzas; pero hay quienes lo requieren para poder tener lo necesario.
Lo que reclaman los alcaldes es justo, ¿pero los modos? ¿El tomar y cerrar la sede principal, oficina del ejecutivo, de la administración pública del estado? ¿La privación de la libertad de cualquier persona? O tal vez el gobierno ya autorizó tácitamente violaciones de la ley como esas con la pasividad que ha demostrado ante normalistas vándalos, destructores y asesinos (Gonzalo Rivas en aquella gasolinera de Guerrero) y seudomaestros de la CNTE.

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Hillary vs. Trump: corren las apuestas

Quien haya seguido, observado y profundizado en el desempeño, la carrera de Hillary Rodham de Clinton a través de los lugares en que ha estado como primera dama, senadora y secretaria de Estado, sabe que de ninguna manera sería una ventaja para México ni para nadie que la demócrata llegase a la presidencia de Estados Unidos en vez del excéntrico Donald Trump.
Lo de la información que la candidata guardó irregularmente en su correo electrónico privado y que fue detectado por el FBI, es sólo la punta del iceberg. Pero enfocándonos en éste solo hecho, ¿para qué necesitaba guardar de manera privada información delicada en extremo quien entonces ostentaba uno de los puestos más importantes, no sólo de su país, sino a nivel mundial, como es el de secretaria de Estado de Estados Unidos? Aun suponiendo (lo que es muy poco probable) que no hubiera habido mala intención de parte de la señora Clinton, demuestra en grado superlativo una actitud irresponsable que puso en peligro todo el sistema de seguridad del país más poderoso del mundo.
En entrega anterior (Oye Veracruz 24/09/16) mencioné que el reconocido teólogo brasileño Leonardo Boff, en entrevista con Carmen Aristegui, dijo que nos preocupan mucho los insultos y desplantes de Trump, pero no nos importa, por ejemplo, que Hillary Clinton haya prometido a Benjamín Netanyahu, primer ministro del estado de Israel, que de llegar a la presidencia va a bombardear Siria e Irán; pero esto no nos preocupa ¿verdad?
Ahora el inquirido por la misma periodista fue el singular (por su austeridad personal) ex presidente de Uruguay José “Pepe” Mujica. Aristegui le preguntó acerca del fenómeno Trump, esperando escuchar la típica diatriba contra el empresario inmobiliario para quedar bien con el populacho en México y en Iberoamérica. Pues el político sudamericano decepcionó a los políticamente correctos, y señaló que la oligarquía global, los supermillonarios internacionales, lo dueños del dinero a nivel mundial, incluidos, por supuesto, los que tienen su actual sede en Estados Unidos, están con Hillary, y los ricos “medios” y las bases (obreros y desempleados) de la unión americana están con Donald Trump.
Y no es un deseo sino una hipótesis de prospectiva, pero ya entrándole a las apuestas, a tres días de la elección me arriesgo a pronosticar que va a ganar Donald Trump y por un margen considerable, mandando al caño a todas las encuestas y encuestadoras. A ver.
Y hasta el próximo sábado, si Dios lo permite.

raulgm42@hotmail.com


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