Aunque a los consumidores les atrae el olor y la textura de los pinos naturales, el 71 por ciento de los árboles navideños que se venderán esta temporada en el país son artificiales.

En total esta temporada se comercializarán alrededor de 4 millones de pinos artificiales y 1.6 millones de naturales.

De los 4 millones de árboles artificiales que se comercializarán este año, 2 millones son importados y 2 millones se producen en México por empresas como Grupo Janel y Naviplastic.

Y es que a la larga comprar pinos naturales cada año resulta más costoso que adquirir uno artificial, que puede utilizarse varias veces.

Por ejemplo, comprar un árbol artificial de dos metros cuesta unos 2 mil 500 pesos, dependiendo el modelo, pero puede utilizarse cinco años.

En cambio un pino natural equivalente en tamaño cuesta unos mil pesos, por lo que el costo por cinco años sería de 5 mil pesos.

La mayoría de los árboles se venden en las tiendas de autoservicio, de conveniencia y hasta en las farmacias, pero aun así en algunos tianguis navideños de la zona metropolitana de Guadalajara, algunos prefieren los naturales.

Tal es el caso de Rocío Zavala, quien compró este año un pino natural para Navidad.

"Mi esposo no está de acuerdo por la deforestación, pero estuvimos preguntando y son más caros los artificiales. Yo lo decidí porque me gusta más el olor del pino natural y porque nunca había tenido uno", dijo Zavala.

Así como ella, muchos de quienes acuden al tianguis navideño ubicado en la Unidad Administrativa Las Águilas, en Zapopan, prefieren los árboles naturales, en este caso importados de Oregon, Estados Unidos.

Ya sea de la variedad Douglas Fir (canadiense), Noble Fir (japonés), NordmannFir o Grand Fir, todos son aceptados por los consumidores.

"Ya es cuestión de gustos de la gente, se venden parejos. La diferencia es que el canadiense tiene mejor aroma, pero tira hoja. El japonés no tira hoja, pero huele menos", explicó Daniel Barahona, quien vende en este tianguis.

El precio de los árboles naturales va de 400 a mil 500 pesos, dependiendo la variedad y tamaño.

"El promedio de vida de un árbol es de cuatro a cinco semanas, pero hay que cuidarlo ayudándolo a hidratarlo y tener menos luces prendidas para no quemarlo", agregó Barahona.

En el país se producen árboles de Navidad naturales, principalmente en el Estado de México y Veracruz, pero son poco aceptados por los consumidores.

"Se produce la variedad Vikingo, pero es muy duro, entonces casi no se mueve, además de que se da muy poco y por eso la gente pide más el importado", agregó Barahona.

Para esta temporada en el Estado de México se destinaron más de 4 mil 200 hectáreas de plantaciones comerciales de estos árboles y ocupa el primer lugar, seguido de Veracruz.