Femsa anunció ayer su nueva apuesta de negocio: el desarrollo de su propia cadena de gasolineras.

Esto lo planea lograr adquiriendo los 227 establecimientos que ya maneja –a través de terceros– bajo su marca Oxxo Gas.

En su reporte financiero, correspondiente al año pasado, la empresa recordó que desde 1995 ha proporcionado servicios y activos para la operación de estaciones a través de acuerdos con terceros que poseen franquicias de Pemex.

La empresa explicó que la legislación mexicana no permitía que Femsa fuera propietaria, debido a la participación de extranjeros en la base de sus inversionistas institucionales.

Pero luego de la apertura que ha concedido la reforma energética, anunció que ha acordado adquirirlas y que planea arrendar, comprar o abrir más gasolineras.

En conferencia con inversionistas, Javier Astaburuaga, director de finanzas y vicepresidente corporativo de Femsa, refirió que, de 2011 al año pasado, Femsa abrió entre 30 y 50 gasolineras cada año a través de los franquiciatarios.

"Con las nuevas regulaciones nos gustaría crecer de una manera más agresiva a como lo hemos hecho", expresó el directivo, sin precisar un estimado sobre su ritmo de crecimiento.

Los planes anunciados por Femsa impulsaron ayer 5.03 por ciento el precio de su acción, a 142.98 pesos por título, en una jornada en la que el índice de precios y cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores avanzó solamente 1.40 por ciento.

Fue el mayor salto porcentual de Femsa en tres años.