Néstor Cerveró, ex director del Área Internacional de Petrobras, fue condenado a cinco años de prisión por delito de lavado de dinero, en el escándalo de corrupción que sacude a la principal empresa del país.

El Juez Federal Sergio Moro dictó la sentencia en la ciudad de Curitiba, la cual puede ser anulada recurriendo a una instancia superior.

Al ex ejecutivo se le acusa de haber recibido sobornos de empresarios que tenían contratos con Petrobras, además de haber enviado dinero al exterior a través de empresas Offshore en Uruguay y Suiza.

De acuerdo con la fiscalía, el exejecutivo, utilizó el dinero desviado para adquirir un departamento en el elegante barrio de Ipanema, en Río de Janeiro, cuyo valor fue estimado en unos 2.5 millones de dólares.

El inmueble fue comprado en nombre de la empresa offshore Jolmey Sociedad Anónima, creada en 2007 por Cerveró y por el abogado uruguayo Óscar Algorta para ocultar el origen de los recursos.

Cerveró está entre los tres ex directores de Petrobras arrestados desde marzo de 2014 en el marco de las investigaciones sobre la red de corrupción que habría operado en la empresa entre 2004 y 2012. Los otros ejecutivos que también han sido detenidos son los ex directores de Ingeniería, Ricardo Duque, y de Abastecimiento, Paulo Roberto Costa.

Según Costa, entre el uno y el tres por ciento del valor de todos los contratos firmados por Petrobras durante el período en que actuó la red fueron desviados para pagar sobornos a funcionarios de la empresa y para financiar a aliados políticos del gobierno, entre ellos el gobernante Partido de los Trabajadores (PT).

Las investigaciones corresponden a los periodos de los dos mandatos del ex presidente Luis Inacio Lula da Silva, y la presidente Dilma Rousseff.