Eduardo Paes, alcalde de Río de Janeiro, prohibió este día el uso de Uber en la ciudad, sin embargo, dejó abierta la posibilidad de un regulación del servicio en el futuro.

El edil, tenía hasta hoy para firmar una ley aprobada el mes pasado por el concejo municipal, “Uber está prohibido”, dijo Paes.

También dijo que los conductores que no paguen los permisos requeridos enfrentarán una multa de hasta 2 mil reales, (unos 493 dólares).

No obstante dijo estar abierto a discutir con Uber Technologies Inc sobre cómo se podría legalizar y regular el servicio.

Por su parte la empresa tecnológica, sostiene que la prohibición es una medida contra la libertad de elegir de los consumidores y la movilidad de una ciudad que es conocida por sus embotellamientos y taxistas descorteses.

Uber ha sugerido que Brasil cree un sistema mediante el cual los conductores de la empresa pague a un fondo regional para el transporte público en la ciudad.

El servicio de taxis que se solicitan por medio de una aplicación ha desquiciado a los taxistas tradicionales en varias ciudades del mundo, ya que cambia drásticamente los modelos de negocios tradicionales que requieren que los conductores profesionales paguen costosas licencias para manejar taxis.