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Sobre el campo minado en que se ha convertido el territorio del estado de Veracruz, existen diversos hilos conductores que convergen en una maraña llamada descomposición social y política, cuyos sinónimos son el estado fallido, la ruptura del tejido social y la muerte cotidiana observada como un fenómeno cruel y “ajeno” según la visión de un sector social ingenuo e insensible.

El asesinato de la dirigente de la alianza sindical ASTRAC-CTM, Marjorie Oropeza Núñez -la tarde del pasado lunes 27 de agosto en Agua Dulce, frontera de Veracruz con el estado de Tabasco- abre una multitud de perspectivas de investigación y análisis.

Los nexos remiten años atrás, por lo menos al inicio de la segunda década del siglo XXI.

En el caso de la zona sur y sobre el tema de líderes obreros asesinados atendamos este caso, para empezar…

El 18 de enero del 2014 fue secuestrado Ernesto Ruiz Guillén (a) “el cometierra”, cuando participaba de una asamblea en el domicilio del dirigente cetemista Leonardo Mendoza (a) “el chaquira”, en Villa Allende, municipio de Coatzacoalcos.
Datos confusos vinculan esta reunión con una protesta de transportistas en el acceso a Laguna Pajaritos y con el arribo de presuntos obreros y grupos de choque a bordo de cinco camiones.
A éstos se les señala como responsables del ataque al grupo de “el cometierra” y “el chaquira”.
En concreto, el segundo de ellos logró escapar mientras que el primero resultó baleado en las piernas y fue plagiado.
La mañana del 5 de febrero de mismo año fue secuestrado en su propio domicilio de Villa Allende el periodista Gregorio Jiménez de la Cruz.
La pérdida de la libertad del colega reportero se convirtió en noticia internacional y atrajo la presencia de corresponsales de medios extranjeros y nacionales en Coatzacoalcos.
El cuerpo de Jiménez de la Cruz fue encontrado –sin vida- el 11 de febrero en un predio de la colonia “J. María Rosado” del municipio de Las Choapas.
Junto a la fosa clandestina donde yacía Gregorio Jiménez, se encontró una más con el cuerpo también ejecutado de Ernesto Ruiz Guillén “el cometierra”, quien formaba parte de la dirigencia de la CTM en Villa Allende.
Un tercer cuerpo sin vida, no identificado, fue ubicado en las inmediaciones de las fosas del periodista y el líder.
Teresa de Jesús Hernández Cruz, nativa de Oluta y vecina de Villa Allende donde operaba su bar “El palmar” muy cerca del domicilio del periodista Gregorio Jiménez de la Cruz, fue señalada como autora intelectual del secuestro y asesinato del reportero.
Como autores materiales fueron acusados Santos González Santiago (a) “el man”; José Luis Márquez Hernández (a) “el pony”; Jesús Antonio Pérez Hernández (a) “la yegua”; Juan Manuel Rodríguez Hernández (a) “el jumanji” y Gerardo Contreras Hernández (a) “el gotzi”.
Presos, todos alegaron inocencia y haber firmado declaraciones bajo tortura. A cuatro años de aquellos hechos siguen en la cárcel.
A estos sicarios los habría contactado Sergio Fernando Montalvo López, ex comandante de la policía municipal de Hueyapan de Ocampo bajo la segunda gestión como alcalde de Gaspar Gómez Jiménez.

Se les habrían entregado 20 mil pesos como pago por el “trabajo” en contra del periodista.

Montalvo López fue señalado en aquel momento de ser jefe de plaza de un cartel del crimen organizado en Villa Allende y “proteger” en calidad de yerno las actividades ilícitas de Teresa de Jesús Hernández Cruz: trata de blancas, explotación de mujeres migrantes secuestradas y forzadas a trabajar en su cantina como pago de cuota para proseguir su camino, entre otras…

Para la Procuraduría de Justicia de Veracruz, a cargo de Amadeo Flores Espinosa, se trató de dos casos distintos, desvinculados entre sí: una fue la historia y asesinato del “cometierra” y otra la del periodista Jiménez de la Cruz.

Algo, sin embargo, une los sucesos: la ubicación de los cuerpos sin vida en el mismo predio y en fosas clandestinas en Las Choapas y el hecho de que ahí operaba la banda de sicarios a cargo de Sergio Servando Montalvo López.

Si damos por cierta la versión de la Procuraduría de Veracruz, entonces los sicarios fueron contratados para el asesinato de un periodista y debieron recibir pagos distintos para la ejecución del líder cetemista en Villa Allende.

O bien, al “cometierra” lo habrían ejecutado motu propio, versión que no encaja con el modus operandi de Montalvo López ni el contexto social y político de la víctima

¿Quién ordenó la muerte de Ernesto Ruiz Guillén “el cometierra” y por qué?

Esa pregunta nos remite desde enero y febrero del 2014 al 27 de agosto del 2018, cuando ha sido asesinada otra líder obrera de la CTM: Marjorie Oropeza Núñez.

Resulta claro que el crimen organizado se ha diversificado desde años atrás: al tráfico de drogas se suman la trata de blancas, la explotación, secuestro y ejecución de migrantes sobre todo centroamericanos, los servicios del sicariato, el cobro de piso, los secuestros en todas las clases sociales, la corrupción e impunidad a partir de los vínculos con el Estado, la compra-venta de armas, el incremento en robo de autos y crímenes dolosos…

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El 30 de marzo del 2015 se halló sin vida el presunto jefe de plaza en Villa Allende: Sergio Servando Montalvo López.

Fue ejecutado a golpes y su cuerpo abandonado en la comunidad de San José del Corral, municipio de Yanga, región centro-montañosa de Veracruz.

El último caso de una líderesa obrera asesinada en el sur de Veracruz abre este artículo: el de Marjorie Oropeza Núñez…

Sergio Montalvo murió cuatro años atrás y su banda está presa –quizá no toda porque Amadeo Flores Espinosa mencionó en su momento a más involucrados y el Procurador que lo sustituyó dio por cerrado el caso-…

En todo caso capturar una banda de delincuentes, en el escenario actual, sólo implica la aparición y/o empoderamiento de otra

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Como ocurre con los periodistas, la lista de dirigentes obreros y también campesinos asesinados parece inagotable…

Al grado que las instituciones responsables de garantizar la seguridad están rebasadas…

Los expedientes en las fiscalías duermen el sueño de los justos y de los injustos…

La sociedad veracruzana vive entre el terror, la indefensión y la indiferencia…

Las amenazas constituyen un secuestro psicológico…

Dormimos orando por nuestros muertos o bajo la lógica del pensamiento egoísta de “yo ni la/lo conocía” y despertamos sólo para recibir noticias de más y más muertos…

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Esta historia se conecta directamente a las operaciones del crimen organizado que actúa in crescendo en medio del traspaso de un gobierno a otro, cuatro meses en que Veracruz sufre un vacío político y de seguridad policiaca…

Hay, empero, más hilos: en algunos casos los cañeros se matan entre cañeros y los líderes obreros se matan entre líderes obreros…

Es un tema aparte y estas palabras son quemantes pero –aunque no es el caso que hemos abordado aquí- no todos los periodistas ejecutados eran estrictamente periodistas y más de uno o más de dos o más de tres estaban ligados al narcotráfico…

Ante la salvaje falla institucional; frente a la muerte como sinónimo de existencia del crimen organizado, la sociedad y los gremios debemos ser autocríticos.

Marjorie Oropeza Núñez lo denunció en un video que subió a redes sociales donde pidió apoyo a las autoridades estatales encabezadas por Miguel Angel Yunes Linares que no la protegieron…

La ambición está cobrando vidas, les dijo…

Ella temía por la suya luego de que fueran asesinados su yerno y una colega dirigente.

Y sí, la dirigente de la ASTRAC-CTM en Agua Dulce tenía razón y nos ofreció el vaticinio de su trágico final.

No podemos observar su historia sin mirarnos en el espejo y reconocer la parte de responsabilidad que nos toca.

Adiós Marjorie: perdónanos, no sabemos lo que hacemos…

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Manuel Huerta Ladrón de Guevara será el jefe de las representaciones de dependencias federales en Veracruz, de acuerdo al nuevo esquema administrativo que diseñó el Presidente electo Andrés Manuel López Obrador para todo el país…

Tendrá acceso a la Secretaría de Gobernación y por tanto tendrá responsabilidad en materia de seguridad desde la perspectiva federal…

Deberá ser y será un hombre muy informado al respecto.

Una responsabilidad como la que AMLO pondrá en los hombros de Huerta Ladrón de Guevara y sus colegas en otras entidades no operará, no podrá operar, sin la visión clara del territorio minado que se pisará día con día…

A nivel estatal Erick Patrocinio Cisneros Burgos será el Secretario de Gobierno y operará directamente con el o la responsable de la Secretaría de Seguridad Pública en la entidad.

Cuitláhuac García Jiménez es nuestro Gobernador electo y sabe, desde luego, el infierno que hereda en materia de inseguridad, amén de la crisis financiera que en realidad es una quiebra casi total de la economía oficial de Veracruz.

¿Cómo se están preparando estos hombres para semejante responsabilidad?

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Me mueve una duda: ¿ya cuenta Cuitláhuac García Jiménez con su respectivo José Fouché?

Sin esa figura –Yunes Linares y Fidel Herrera han sido los operadores políticos perversos de sí mismos- no hay manera de gobernar…

El genio tenebroso llamó Stefan Zweig al político francés que creó el concepto de la Policía Política.

En México ese papel lo desarrolló históricamente Fernando Gutiérrez Barrios.

Es un tema básico, el abc del poder: como el placer, la política sólo puede entenderse desde el amor y el dolor mezclados inevitablemente.

No entenderlo es como creer que los curas en realidad se bañan en agua bendita…



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