Salvador Muñoz

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Para muchos, “la política” que aplica el secretario de Gobierno, Turismo, Letras, Parques y Jardines y demás, Eric Cisneros Burgos, Bola 8 para sus cuates, es simple: estás conmigo, eres mi amigo; difieres, eres mi enemigo. No hay espacio para el diálogo, el acuerdo, vamos, ¡para la política! Es el ejercicio del poder por el poder como en muchos escenarios ha sido exhibido por varios exponentes de la 4T.

Por eso, llamó poderosamente la atención que en una de las más recientes visitas al Congreso del Estado que hizo Pedacito de Chapopote (como lo apodaron en Baja California), se acercara a saludar al diputado local Maleno Rosales, quien ha de repetir en la siguiente Legislatura.

¿Y en qué radica lo extraordinario? En que para los que atestiguaron la salutación, vieron por primera vez, un dejo de Política en Bola 8 y más ante un personaje como Maleno que gusta hablar derecho (o como dijera el xalapeño, “Al chile”) y que en esta LXV Legislatura que concluye en pocos días, dio muchas muestras de que no se anda con rodeos cuando de defender sus causas se trata.

Con apenas secundaria terminada, el diputado Maleno dio muestras de que para servir a su pueblo, se necesitan ganas para hacerlo más que títulos o diplomados y esto se lo refrendaron en su distrito en las recientes elecciones que le dan oportunidad de repetir como legislador.

La LXV Legislatura le dio severos reveses a Maleno que van desde las guerras internas como los yerros propios de la curva del aprendizaje, a tal grado que hubo morenos y alguno que otro prieto, muy prieto, que lo llevaron a la expulsión de su partido sin tomar en cuenta su posición en el partido: Consejero Nacional y secretario de estudios y proyectos de nación del Comité Ejecutivo Nacional de Morena.

Al final, no prosperó esa demanda.

A Maleno hay que reconocerle el triunfo en el distrito de Medellín y lo que significa tal desde dos puntos:

El primero, haberle ganado al alcalde de la cabecera del distrito quien compitió para la curul. Maleno ganó en una elección intermedia con 51 mil 980 votos y unos 10 mil 500 de diferencia sobre Polo Deschamps.

El segundo, es tomar en consideración el tridente que se puede conformar para lo que se viene en el 2024, en las figuras de Maleno y el Huevo Arteaga (en sus respectivos distritos) y de refilón, lo que haga desde el Congreso federal Rosa María Hernández Espejo… ya se ganó Medellín con alcaldía y distrito; la meta lógica es ir por Boca del Río y Veracruz en sus mismos tenores.

Maleno es un líder natural ajeno a las poses… tan así, que se le puede ver llegar al Congreso o a Coatepec, donde fue visto en un evento al pie del Cerro de las Culebras, en su viejo Topaz del año del caldo, que lejos de tener cinturones de seguridad, trae “cinchos” de seguridad.

Un moreno se le acercó en el Pueblo Mágico y a sabiendas de que no hay pex si va derecha la flecha a Maleno, le preguntó el porqué traer ese vehículo cuando bien podría andar en una camioneta de lujo. La respuesta pinta de cuerpo entero al diputado:

“No me quiero acostumbrar porque luego voy a sentir feo…”

Quizás por eso, por la sencillez, humildad, liderazgo que ejerce en la zona, pero ya con la experiencia de una Legislatura llena de pros y contras, es que Bola 8 puede ver en Maleno a un aliado, aunque por el otro lado, Maleno vea más en ese sesgo sorpresivo de acercamiento político de Bola 8, la oportunidad de seguir haciendo más por su distrito, por su gente, coordinando esfuerzos en aras de que gane el Pueblo, gane Morena, y gane el Gobierno estatal… cuestión de enfoques y de intereses entre Bola 8 y Maleno.

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