Sergio González Levet
____________________________
Felicidades a todos los colegas en el Día de la Libertad
de Expresión; a todos, hasta a los texto-servidores
Si nos atenemos a los resultados, a los números fríos, el pasado domingo el partido Morena tuvo otro éxito electoral pues ganó cuatro de las seis gubernaturas que estaban en competencia.
Eso significa que tuvo un 75 por ciento de efectividad que ya lo quisiera la Pulga Messi.
Y sí, en Oaxaca, en Hidalgo y en Quintana Roo las huestes pejistas arrasaron con la votación y lograron triunfos contundentes; en Tamaulipas ganaron también, aunque no con tanta holgura. Y solamente perdieron en Aguascalientes, que es una plaza panista inconmovible, y en Durango, donde fueron con una candidata impresentable.
No consiguieron el carro completo como lo hacía el PRI en sus buenas siete décadas de dictadura perfecta, pero están alzados como la mayor fuerza electoral del país, no obstante que es un partido de reciente creación (sí, un partido, porque está registrado como tal, participa en elecciones y recibe prerrogativas como los otros; sí, un partido, no un movimiento popular, como lo quiere disfrazar ladinamente su patriarca, Andrés Manuel López Obrador, para tratar de hacer travesuras anti-institucionales y transformaciones anti-constitucionales).
Pero Morena tuvo una copiosa simpatía en las urnas, y obtuvo una Victoria bien helada… perdón, una victoria notoria y abultada.
Mario Delgado y los otros marrulleros que detentan los puestos directivos de Morena en el país y en los estados se lanzaron, desde que se dieron a conocer los primeros resultados del domingo, a declarar que habían ganado todo, que el país estaba pintado de guinda, que los mexicanos habían mostrado que es es un amor estar con Obrador… ¡y que habían asegurado el triunfo y la continuidad para 2024!
Hay, sin embargo, tres cositas que nublan el triunfo tan celebrado:
Sí, en el papel ganaron en procesos de elección que generalmente fueron muy poco concurridos, pero habría que preguntarse en realidad cómo estará en el corazón de los mexicanos la preferencia de los morenos y su mesías, que es lo que realmente cuenta.
Nos vemos en 2024.
Twitter: @sglevet
Otras Entradas
2022-06-03 Por favor, Damián Alcázar
2022-06-02 Yeri Mua contra Cuitláhuac
2022-05-31 La violación de la mente
2022-05-30 El Acuario, en riesgo
2022-05-27 ¡Camilo!
2022-05-26 Cuitla y el octavo mandamiento
2022-05-25 Patricia Ortega, pieza importante
Lo más visto
13 Dic 2018 Convenio entre el Conmas y Club Rotario, en favor de quienes más lo necesitan
12 Dic 2018 #LaBasílicaMenor de Nuestra Señora de Guadalupe, en el barrio de El Dique
10 Dic 2018 Obtendrían descuento en el Predial discapacitados y adultos mayores
12 Dic 2018 Rinden protesta nuevos funcionarios municipales #Xalapa
13 Dic 2018 Pide Congreso al Orfis un informe sobre la adquisición del Sistema de Videovigilancia