Salvador Muñoz

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Es comprensible hasta cierto punto que estén bajando de la contienda por la Gubernatura a Rocío Nahle… no se le ven ganas…

Los nahlistas podrían decir que está entregada en cuerpo y alma al proyecto de Dos Bocas, encargo del Presidente, y por ende, una vez que concluya con éxito la encomienda, el premio a su esfuerzo puede ser la candidatura…

El problema es ése… estaría a la espera de la bendición del Señor y no de convencer a los veracruzanos de sus intenciones políticas para con la entidad.

Distinto sería verla quizás un viernes por la noche llegando a su ciudad natal… digo, a la ciudad que la adoptó; el sábado y domingo haciendo recorridos con sus amigos veracruzanos, escuchando sus demandas, peticiones y por qué no, hasta reclamos…

O quizás escucharla atendiendo esa población que año con año pide la recategorización de tarifas eléctricas así como lo hicieron en algunos puntos de Tabasco… pero no… pareciera que lo que menos quiere expresar la señora es su intención de ser candidata… aunque respira, no aspira ni suspira…

Hablan incluso que en esa última reunión que le armaron en el World Trade Center para que se diera vuelo hablando de las bondades de la Reforma Eléctrica, si bien tuvo un buen recibimiento el que le dieron los acarreados al mitin, no fue comparado con la calidez que se dejó sentir cuando nombraron a Cuitláhuac allí presente… entonces vio ella el porqué y el por quién estaban congregados miles de veracruzanos ese día… no era por ella.

A ello sume la sacudida que se ha dado el gobernador de los afines a Nahle en su Gabinete aun cuando hay pulgas que nadie entiende el porqué las mantiene allí.

Pareciera que Nahle, pues, bajó los brazos… ¿y el camino libre para Sergio Gutiérrez Luna?

Quien piense que el camino para el diputado nativo de Minatitlán ha sido allanado, se equivoca…

En cuanto se percibe el descenso, caída libre, desplome de Rocío Nahle, el gobernador Cuitláhuac parece que ordena mover sus piezas… y un colado: Lima Franco, Zenyazen Escobar y Juan Javier Gómez Cazarín. A quien meten con calzador, Bola 8.

La mayoría podrá entender Lima Franco, Zenyazen y muy forzada, la presencia de Bola 8 por ser miembros de su Gabinete… ¿pero el Jucopo?

De un modo u otro, hay quienes ven sumisión de poderes ante el Ejecutivo, como es el caso del Poder Judicial o el Legislativo; en el caso de Morena, ellos lo ven como Coordinación de Poderes… cuestión de enfoques, cuestión de prismas, pero lo más importante, cuestión del lado en que estés… recuerden que estar en el Poder es de cierto modo estar en el lado correcto de la historia, no importa del partido que sea…

Para nadie es un secreto que Gómez Cazarín  y el Ejecutivo trabajan así, coordinados, en una sola línea, y en muchas de las ocasiones, Lima Franco ha sido parte de estas concertaciones…

Si se pusiera en una línea de arranque a los cuatro de Cuitláhuac con Sergio Gutiérrez, aparentemente la parejera sería con Juan Javier Gómez Cazarín por una simple razón: estoy seguro que es el diputado local que en casi cinco años de fungir como tal, ha recorrido el estado no sólo en función de campañas electorales, sino acompañando a sus compañeros legisladores y hasta cumpliendo gestorías; agregue que a ras de suelo, empata con la raza, con la gente, con el pueblo y de cierto modo, cada uno en su estilo, es junto con Sergio, los más pasables que puede tener Morena en cuestión de trato.

De ahí le sigue Zenyazen que en función de su encargo, trata con la cantidad de gente multiplicada por maestros y padres de familia, sumando sindicatos… Lima Franco francamente no parece político… queda muy rezagado. Dijeran: No se le ven patas de gallo ni en el cutis!

Bola 8 viene haciéndose campaña desde hace rato pero a la vez es el promotor número 1 de Sergio Gutiérrez Luna porque es el que más lo convoca y no sólo por sus declaraciones, sino porque se copió el eslogan del de Minatitlán: Bola 8 dice “Orgullo veracruzano”; Sergio, “Orgullosamente veracruzano”...

Como sea, ante la desinflada de Nahle, Cuitláhuac tiene que agarrar su mazo y sacar sus barajas… su equipo sabe que hay que negociar en el Altiplano cuando se llegue el momento: Tú tienes tu carta; yo tengo las mías… tres barajas para el Senado y mínimo, 20 para las curules federales y las pluris… Cuitláhuac ya está aprendiendo…

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