Salvador Muñoz

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Chiste! Chiste! Chiste!

– Matrix navideño: Neo y Trinity tienen un hijo… ¿Cómo se llama?

– ¡No lo sé!

– ¡Se llama Tri-Neo!

Sí, lo acepto… está seboso el chiste, pero en mi descargo, el chiste no es mío, se lo escuché al Carnal Marcelo. No, no al Patiño de Tin Tan, sino al canciller quien a manera de popularizarse, le ha dado por reafirmar ese apodo que en su momento se lo achacaron para tratar de minarlo, pero que ahora lo utiliza para de cierto modo, evitar entre la raza de bronce el trabalenguas que implican sus apellidos: Ebrard Casaubón. Sí, mejor el Carnal Marcelo.

Algo similar le ocurre a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México con su apellido: Sheinbaum, por eso ya optaron por Claudia.

Quien de plano no tiene problemas con sus nombres y apellidos es Adán Augusto López Hernández, es más, tan es así, que en Veracruz, el “Que Siga López” ha tenido un efecto tan singular por algo muy simple: la gente se identifica con un apellido común y popular en México como lo puede ser el López, Hernández, Gutiérrez…

Agregue a Adán Augusto el acento al hablar con el que igual, es un distintivo singular lejos del afresado de Ebrard y distante del chilango de Sheinbaum.

¡Ah! El chiste del Carnal Marcelo lo vi en su Tik Tok al lado de su esposa Rosalinda Bueso quien le tocó hacerla de patiño.

Marcelo Ebrard está viviendo un episodio en el que caen muchos políticos que utilizan esta plataforma: de lo informativo caen en querer hacerse el chistoso.

Sí, me pueden decir que hay muchos políticos que lo hacen, pero en inicio, así le dieron forma, como el caso de Polo Deschamps, donde su actividad política quedó a un lado para divertirse junto a sus hijos haciendo videos muy chistosos…

Vamos, se trata de hacer un estilo propio, como el mismo Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, quien como Presidente de la SCJN, daba tips legales con singular gracia.

En el caso del Carnal Marcelo, sólo se podría definir que por querer ser gracioso, perdió la gracia… y ya saben que en Veracruz para bailar la Bamba se necesita un poquito de gracia… como la tuvieron hace poco Sergio Gutiérrez Luna y el alcalde de Orizaba, Juan Manuel Diez Francos.

El encuentro se dio en el complejo turístico municipal temático “Casavegas”, donde se recrea la época medieval española, con un castillo, casa Real, escudos del linaje, pendones coloridos, danzas y cantos, armaduras y una representación de las torneos a caballo donde las y los participantes portan cota de malla, escudos, lanzas y espadas de acero… en pocas palabras, batallas entre caballeros, aunque en el caso de Cheko y Diez, fue un encuentro de caballeros, de políticos y liderazgos.

Si bien dicen que el tema en que se concentró la charla entre el minatitleco y el hispanozabeño fue el desarrollo social y bienestar de los veracruzanos, es evidente que independientemente de los asuntos platicados, se crea una alianza lejos de siglas, colores y partidos… sí, porque para ser político, también tiene su chiste y no precisamente como los que se tira Ebrard Casaubón… 

Chiste! Chiste! Chiste!

– ¿Qué pasaría si Bola 8 tuviera ojos azules?

– ¡No lo sé!

– ¡Sería Paleta Payaso!