Ángel Rafael Martínez Alarcón

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El próximo martes tres de enero del recién llegado el año 2023, se conmemoran tres décadas del fallecimiento de Sergio Galindo Márquez,  el escritor xalapeño más importante del siglo XX, en la literatura mexicana. Nacido en  la calle insurgentes en el número 26 del centro histórico de Xalapa. El 2 de septiembre de 1926, siendo obispo de Xalapa, San Rafael Guízar y Valencia, presidente de México, Plutarco Elías Calles, y gobernador del Estado, el General Heriberto Jara Corona. El movimiento estridentista alcanzó su máximo apogeo en la capital del Estado, bajo el liderazgo de Manuel Maples Arces, (1900-1981). Esos años Jalapa era todavía una pueblerina pequeña ciudad.

Ese domingo tres de enero de 1993, por la tarde noche, un sobrino del escritor vía telefónica  me informaba que había fallecido en el puerto de Veracruz, su tío Sergio. Luego reaccione que el distinguido xalapeño no era un adulto mayor para morirse ese momento de su vida, 67 años que los había cumplido el  pasado septiembre. Para finales del siglo XX, aumentó el promedio de vida para la población masculina. Pero don Sergio Galindo,  se negó a seguir viviendo con dos dolores profundos, el primero el fallecimiento de su hijo, el dolor propio de la enfermedad. 

El apellido Galindo Márquez,  está en la impronta xalapeña, como uno de tantas familias del centro de la ciudad, en muy cercana al barrio de San José, donde desde el siglo XVI se levantó la iglesia de San José. Dicha familia ha destacado en el empresario, en la cultura, así como también en los espacios religiosos de la Iglesia Católica Apostólica Romana. Ya son varias las generaciones en el transcurso de los siglos XX y XXI están destacando, ya con una nueva generación. Como niño en mi hogar siempre estuvo presente la empresa de Metálicas Galindo, y fui creciendo, encontrándome con varios integrantes de la familia Galindo,  en la primaria, en el espacio religioso, y finalmente en lo cultural. Desde el otoño de 1982, vengo participando en la vida cultural de mi ciudad, con tan sólo 16 años. 

Mis primeras lecturas de la obra de Sergio Galindo  son: polvos de arroz, El Bordo, La comparsa, esta última nos relata de los pocos carnavales celebrados en la capital del Estado de Veracruz,  hubo cierto malestar de la sociedad xalapeña, por ser tan agudo en retratar a  dicha sociedad.

El lunes  18  de agosto de 1984,  fue mi primer encuentro con escritor xalapeño, Sergio Galindo,  el Ayuntamiento Constitucional de Xalapa, encabezado por  Ignacio González Rebolledo (1936-2022), le rindió un homenaje, declarándole Hijo Predilecto de Xalapa. Con el pasar de los años. Seguramente fue a sugerencia del culto síndico xalapeño, Armando Méndez de la Luz. La familia Galindo se dieron cito, sus hermanos, sobrinos, primos, sin dejar a la familia Galindo González: Ana Mónica. Juan Gustavo, Sergio José (1980-1988). Manuel, Angela y Sebastian. En septiembre del 2016, escribí algunas líneas biográficas, cfr: https://www.diariodexalapa.com.mx/cultura/-992099.html

Luego del acto oficial, nos fuimos al Casino Español, para disfrutar de la comida. Ahí recibí una de las grandes enseñanzas de Sergio Galindo, el descorchar las botellas de vino tinto, y así como servir una copa de vino. Cada vez que sirvo vino, recuerdo las sabias palabras.El fotografo español Miguel Angel Quijada,  dejó testimonio de dichas copas, Cfr. La Palabra y Hombre, # 59-60. 1986.

Enero de 1993, hace 30 años hubo una serie de eventos luctuosos por el sensible fallecimiento de Sergio Galindo, son tan sólo 67 años, dejó este mundo. Su cuerpo fue cremado en la ciudad y puerto de Veracruz. El viernes 8 de enero del año antes mencionado, en el Salón Azul de la Unidad de Humanidades de la Universidad Veracruzana, se realizó  un sencillo homenaje, con discursos del escritor Raúl Hernández Viveros, y el académico, José Luis Martínez Morales

El viernes  22 de enero de 1993, por la tarde-noche en el Museo de Antropología, coordinado por el antropólogo Fernando Winfiel Capitaine. Se presentó el libro: Sergio Galindo. Narrador. Universidad Veracruzana, 1992. Cfr https://libros.uv.mx/index.php/UV/catalog/book/BI075

Para el viernes 29 de enero de 1993,  acompañé al Dr. Gonzalo Aguirre Beltrán, (1908-1996), ex rector de la Universidad Veracruzana en el periodo de 1957-1961. Eran mis primeras semanas de becario con Aguirre Beltrán.  Para asistir a la ceremonia de homenaje a las cenizas del escritor xalapeño, Sergio Galindo Márquez. El acto se efectuó en el auditorio del Museo de Antropología, con la asistencia del gobernador Constitucional del Estado de Veracruz, Patricio Chirino Calero, como rector el Dr. Emilio Gidi Villareal, autoridades académicas, municipales,  familiares. Se montó un guardia de honor a la urna que guarda las cenizas del fundador de la Revista La Palabra y Hombre.

Las cenizas del fundador de la Editorial de la Universidad Veracruzana, quien la abrió las puertas para su primera publicación en México al nobel de literatura 1982, Gabriel García Márquez ( 1926-2014), fueron esparcidas allá en El Bordo, municipio de las Vigas de Ramírez.

La obra de Sergio Galindo sigue vigente, no sólo con los textos publicados, sino también el cine, Otilia Ruada, es sin duda el film con mayor éxito. La editora de la Universidad Veracruzana, con el premio “Sergio Galindo” . El Ayuntamiento de Xalapa, le rinde un permanente homenaje con una plaza en la calle Othoniel Rodríguez Balzarte, esquina avenida de las Américas, Plaza abandonada sin placa. Podemos  conocer su obra en https://issuu.com/editorialariadna/docs/el_hilo_de_ariadna_07_sergio_galindo. El consejo de la Crónica de Xalapa, en septiembre de 2016, organizó un conversatorio en el Palacio Municipal de Xalapa, con una conferencia del investigador José Luis Martínez Morales, cfr https://youtu.be/uzFMBqXrk_A