Salvador Muñoz

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Hay quienes creen que un debate puede ser decisivo para encaminar al triunfo al candidato, y es seguro que sí, siempre y cuando se conjunten mínimo, dos elementos en éste:

El primero, que el debate no sea un monólogo acompañado de indirectas y que sea más un diálogo (rayando en la discusión y confrontación directa) entre los aspirantes a un cargo. Es decir: Al tú por tú, o dijera Irma Serrano: ¡A calzón quitado!

El segundo y más importante: Que a nuestros electores les interese el debate.

En la plataforma que vi el Debate, la del OPLE, el auditorio no llegaba ni arañaba los 3 mil 500 espectadores cibernéticos y es seguro que de esa cantidad, muchos sean afines a alguno de los candidatos; algunos, por cuestiones de trabajo, lo hayan visto; otros, si de pura casualidad llegaron al debate por televisión, a las 7 le hayan cambiado para ver el futbol o bien, muchos venían de regreso después del “puente” del 10 de Mayo, que ni se enteraron del debate… aunque lo más seguro es que vinieran siguiendo la transmisión del partido de soccer; por lo tanto, al menos en Veracruz, un debate o dos debates no son factor para ganar una elección o perderla.

En sí, quienes hayan tenido oportunidad de haber visto el primero, habrán notado que no varió en mucho la tesitura en que se desempeñaron los candidatos en esta ocasión… es como si hubiéramos visto una repetición o el remake del Primer Debate.

Así que si hubo yerros en los candidatos, como el que le achacan a Rocío Nahle de estar leyendo en un alto porcentaje sus propuestas de trabajo, no pasa de un “meme de Gandhi”... O que le atribuyan que haya perdido el control, es cuestión de enfoques…

O el que Pepe pase a ser objeto de los señalamientos del dedo flamígero de “Señora Católica”, estigmatizándolo con cera de las Velas Perpetuas con la palabra “Adúltero”, no pasa de un chisme de lavadero que si es, es un asunto netamente particular que no exime de mover al morbo.

(Cápsula Cultural: Señora Católica es un personaje sarcástico de Zacatecas –Se los juro, no es broma… es de Zacatecas– interpretado por Erika Edith Navarro, quien va “predicando” la Palabra de Dios contra todo los pecados que hay en nuestra sociedad)

Polo Deschamps sigue haciendo su papel como en el anterior debate… les digo: no varió mucho: Le dio un golpecito a Nahle; le acomoda dos-tres putazos a Pepe. La lógica apunta a dos razones:

La primera: Más fácil pegarle al árbol de Pepe, en espera de que lo que caiga, lo coseche Polo…

La segunda: Dice Polo que lo llamaron los Yunes para madrear a Nahle… pero parece que Morena al final lo llamó.

¿Quién ganó el debate? Es la pregunta con que amanecí este lunes… se las devolví con ¿Cuántos vieron el debate?

El moderador Javier Solórzano asegura que en el primer debate fueron 2 millones los que lo vieron… En la plataforma del OPLE, apenas si llegó a 3 mil y cacho de espectadores…

Pero respondiendo la pregunta: El debate lo ganó Nahle… según los morenos y sus encuestas… pero el debate lo ganó Pepe, según el PRI y sus encuestas; y hasta Polo ganó el debate, “por sus mejores propuestas”, dijo Movimiento Ciudadano.

Al final, el debate no deja de ser “las semifinales de futbol de la Opinión Pública”, que estuvo interesada en ver a los candidatos que a Cruz Azul contra Pumas… aunque les apuesto que el resto de los veracruzanos estuvieron más al pendiente de los segundos… entonces, el debate lo ganó el balompié.

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