Un artero crimen fue descubierto la tarde de ayer en un edificio ubicado en la calle Arteaga de esta ciudad.

Un hombre, de 56 años de edad, fue hallado muerto en el interior del cuarto que rentaba, con golpes en todo el cuerpo y alrededor de su cuello tenía el cable de una plancha enredado.

Un familiar encontró su cadáver al acudir a visitarlo en dicho edificio, lugar donde recientemente había llegado a vivir.

El parte oficial señala que, al filo de las 14:30 horas de ayer, fue reportado al número de emergencias 066, el hallazgo de un hombre sin vida en el interior del edificio número 10 de la calle Arteaga, en la zona centro de esta capital.

Elementos de la Policía Estatal se trasladaron al lugar, donde se entrevistaron con quienes se identificaron como familiares del finado, los cuales los condujeron hasta un cuarto de la planta alta del edificio, donde se habían registrado los hechos.

Tras corroborar el hallazgo, los policías acordonaron la zona y solicitaron la intervención de las autoridades ministeriales y del Servicio Médico Forense para que se encargaran de tomar conocimiento de lo sucedido.

Minutos más tarde al lugar arribaron dos ambulancias forenses y los peritos en criminalística entraron al domicilio para realizar la criminalística de campo.

Por su parte agentes de la Policía Ministerial comenzaron las investigaciones entre los vecinos, quienes argumentaron no haber escuchado o visto nada fuera de lo normal.

Cuando tocó a los familiares del fallecido dar su declaración, indicaron que al filo de las 14:30 horas habían llegado al domicilio mencionado a buscar a José María Fernández, de 56 años de edad, quien recientemente había llegado a vivir a ese edificio, y fue el domingo la última vez que tuvieron contacto con él, pero después, al ver que no respondía las llamadas que le hicieron, decidieron ir a buscarlo, y se encontraron con la macabra escena.

Terminadas las diligencias de ley, el cuerpo de José María fue subido a una ambulancia y trasladado al Servicio Médico Forense, donde se le practicarían los estudios de ley.

Los peritos informaron que tenía al menos 10 horas de fallecido, además de que presentaba golpes en todo el cuerpo y había sido estrangulado con un cable de plancha.

Hasta anoche las autoridades desconocían el móvil del crimen, pero no descartaban un posible robo, pues en el interior del cuarto todo estaba revuelto.