José Luis Ortega Vidal

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Primera Plana, el semanario que publicaba en Coatzacoalcos, desapareció con la vida de su director.  

De ascendencia periodística –su padre fue un destacado reportero y editor en Coatzacoalcos y la región sur de Veracruz- Javier Juárez Vázquez fue “levantado” la tarde del 30 de mayo de 1984 y al día siguiente su cuerpo sin vida apareció sobre la vieja carretera hacia Minatitlán.  

El asesinato del periodista porteño atrajo la atención de la INTERPOL, de la cual fue titular en México el célebre policía y torturador Florentino Ventura Gutiérrez.  

¿Por qué una organización policiaca de trascendencia mundial envió investigadores tras el asesinato de un reportero y editor local en el antiguo Puerto México?  

Los años, reportajes y reportajes, entrevistas, desclasificación de archivos en México y Estados Unidos, investigaciones de periodistas así como de ex miembros de la DEA, la CIA, la Dirección Federal de Seguridad ya desaparecida lo mismo que el CISEN -su organismo sustituto- han ido arrojando una explicación a medias, aún sin final, sobre aquel suceso.  

A tal grado fue un investigador nato, del más alto nivel, que Javier Juárez Vázquez fue informante de confianza de Manuel Buendía Tellezgirón: el más importante Periodista mexicano de los últimos 70 años.  

Hay tres fechas, tres acontecimientos unidos vía datos duros e históricos encaminados a una conclusión de la cual habría información oculta por el peso político nacional e internacional de personajes involucrados, vivos y muertos…  

(2)  

31 de mayo de 1985: matan a Manuel Buendía y aparece muerto Javier Juárez Vázquez, su informante sobre la existencia de un rancho donde –en el sur de Veracruz- pararían aviones abastecidos de cocaína desde Colombia y con destino a Estados Unidos, y en el cual entrenarían guerrilleros centroamericanos.  

El 14 de julio pasado Netlix estrenó su documental RED PRIVADA ¿Quién mató a Manuel Buendía?  

Allí se menciona al periodista Javier Juárez Vázquez.  

Bajo un nombre equivocado, ya hizo referencia al director de Primera Plana la periodista Anabel Hernández y hay numerosos trabajos de investigación de la revista PROCESO y de medios de comunicación norteamericanos, donde se vincula la muerte de Manuel Buendía al tema sobre el cual Juárez Vázquez le informaba en forma directa, visitándolo en la ciudad de México.  

28 de febrero de 1995: es asesinado el agente de la DEA Enrique “Kiki” Camarena en la ciudad de Guadalajara.  

Aquel crimen marcó no el final de los cárteles en México, sino su expansión.  

La muerte de Camarena hundió al presunto autor intelectual –por el lado del crimen organizado- del primer cártel en México- Miguel Ángel Félix Gallardo, quien ha negado tal responsabilidad.  

Cayeron con él sus principales cómplices: Rafael Caro Quintero y Ernesto Carrillo Fonseca.  

El cártel de Guadalajara nació bajo el auspicio del gobierno mexicano, concretamente de la Dirección Federal de Seguridad, cuyo director Antonio Zorrilla fue encarcelado bajo el señalamiento de haber ordenado el asesinado del autor de Red Privada en Excélsior.  

El recuento de los hechos aludido en el documental de NETLIX remite a lo ocurrido nueve meses antes en la ciudad de México y en Coatzacoalcos: el asesinato de los periodistas Manuel Buendía y Javier Juárez.  

Hoy se conoce el origen de aquel doble crimen: la responsabilidad de la CIA –agencia norteamericana de inteligencia- en el alquiler de un rancho a Rafael Caro Quintero para usar sus pistas en el trasiego de droga adquirida por el gobierno estadounidense –vía el cártel de Guadalajara- a la mafia colombiana, cuyas ganancias se usaron en la compra de armas en Irán.  

Dicho armamento era canalizado a la Contrainsurgencia en Nicaragua con Edén Pastora, el “Comandante Cero”, como una de sus figuras principales luego del triunfo de la Revolución Sandinista en 1979.  

Javier Juárez Vázquez obtuvo datos al respecto en una época signada por la opacidad y la represión brutal del Estado mexicano respecto a sus controles internos y externos de poder.  

Sin tecnología, Juárez Vázquez demostró una habilidad notable en la búsqueda de información periodística profunda.  

Tales condiciones lo llevaron a la oficina de Manuel Buendía y a convertirse en fuente de confianza del periodista más y mejor informado de México.  

1º de Noviembre de 1985: En Sánchez Taboada, una desconocida población ubicada en el selvático Valle del Uxpanapa, Veracruz, fueron ejecutados 22 judiciales federales.  

Las versiones oficiales ubicaron a los policías a partir de la lucha contra el narcotráfico, dado que la zona convertida en su tumba ha sido y es un pródigo territorio abocado a la siembra y trasiego de marihuana.  

Ahí, se habría encontrado el muchas veces mencionado rancho que Rafael Caro Quintero alquiló a la CIA para la operación Irán-Contras.  

Hay diversas referencias respecto a este conjunto de historias.  

Comparto las direcciones:  

Hipótesis sobre el asesinato del periodista Javier Juárez Vázquez