Salvador Muñoz

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Creo que el mayor problema que tiene la Oposición no es que se “legalice” la veracruzanidad de Rocío Nahle…

El “chauvinismo provinciano” que alegan los contras de la “veracruzanización” de Nahle y de refilón Hugo Gutiérrez Maldonado, Ramón Díaz Avila y hasta de Ricardo Ahued, por citar a los que se verían beneficiados con la llamada Ley Nahle, es tan ramplón para los tiempos de globalización que se viven, que sólo dejan ver qué tan arcaicas pueden ser nuestras Leyes o peor tantito, nuestros pensamientos… ¡o las cosas cosas!

En lo particular, si hubiera que elegir entre un “naturalizado” (como se estila a decir en el argot futbolero), yo votaría por Ahued, sin pensarlo dos veces.

Y no se trata de misoginia, ni favoritismo por ser xalapeño (yo soy adoptado)... sino por trabajo y hasta por reputación… recuerden la Leyenda que se teje en torno al Senador con Licencia de que fue bajado por abanderar la lucha de ciudadanos demandando menos cobro de luz…

Hasta cierto punto, se entiende que se busque la armonización de las leyes que en otros estados ya se ejerce, como en Querétaro, donde Mauricio Kuri González, nativo de Orizaba, Veracruz, es gobernador; aunque si se ponen a checar las letras chiquitas de la Carta Magna, igual hay luz verde para competir por la gubernatura siempre y cuando se cumpla los requisitos establecidos…

Ahora que si checamos, la bulla que hizo el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso local, Juan Javier Gómez Cazarín, con la Ley Nahle, pareciera que tenía un objetivo o dos muy claros:

El primero, subir al balcón a Rocío Nahle, no entre los morenos, porque allí está posicionada… la pretensión era colocarla en el escenario social, en los medios, en las noticias, entre columnistas, en el chisme, en las pláticas… no importaba si hablaban bien o mal, era lo de menos; el asunto era que volteara todo mundo a ver quién es Rocío Nahle, identificarla verbal y visualmente… los espectaculares no eran suficientes…

Como sea, Rocío Nahle se ubicó, se colocó, los comerciales fueron buenos… por supuesto, no es suficiente este aparador en que la pusieron… pero es el primer paso.

El otro asunto que le interesaba a Gómez Cazarín, muy independiente de la armonización jurídica para “jarochizar” a Nahle, era dejar en claro entre el resto de los “corcholatos de casa” quién es la buena y con un Ahued que pinta su raya, alguno que otro que ya dijo que ha de esperar mejores tiempos, y el resto, ni fu ni fa, todo indica que ese segundo paso ya está establecido…

Por el momento, deja que la Ley Nahle repose…  ni caso moverle… ¿para qué? si el escándalo de las elecciones internas de Morena se comen toda la atención…

El siguiente paso es cuando se dé por hecho la “veracruzanización” de Nahle y se lance a los cuatro vientos ello aunque han de precisar que la neojarocha lleva más de 30 años viviendo en la entidad; Ahued, por ejemplo, toda su vida; Hugo Gutiérrez, cuatro años aproximadamente y Ramón Díaz Avila ¡sepa la bola!

Vivimos en un mundo globalizado y los “chauvinistas de provincia” han de reclamar y con justa razón que el mundo está globalizado, pero Veracruz no… insisto, creo que nos falta colmillo a los veracruzanos y ya que se habla e insiste tanto de la naturalización de los políticos, igual debimos pedir enroques… ¿Qué hubiera pasado si a los queretanos les pedimos cambalache? ¿En el 2021 les dábamos a Cuic, y que nos prestaran a Mauricio Kuri?

¿O que en la Jucopo, a los campechanos les hubiéramos mandado a Juan Javier Gómez Cazarín y ellos nos enviaban a Alejandro… Gómez Cazarín? ¡Puf! Pues en una de ésas, y tenemos otro veracruzano que podría ser Gobernador pero ahora por Campeche… ¡al tiempo!

Aunque el mayor problema que tiene la Oposición no es que se “legalice” la veracruzanidad de Rocío Nahle… sino creo que son dos puntos:

a.- Que crea la Oposición que en una elección, no le puedan ganar a Nahle…

b.- Que crea la Oposición que Nahle pueda ser peor que Cuic…

Y bien cabría el tercer punto:

c.- Las dos anteriores juntas.

smcainito@gmail.com