Son más previsibles que los horóscopos
________________________________________________________
No cabe duda que las leyes electorales mexicanas son un entuerto. Dividir el proceso en precampaña, inter campaña y campaña, es una locura mayor que una reflexión de Vicente Fox. Al final, las tres etapas, para el ciudadano, son exactamente lo mismo. Veamos.

El señor López Obrador, reciclará lo que ha señalado en los últimos tres lustros y su obsesión serán los ataques a ‘la mafia del poder’. Toma el llavero…

Por su parte, don Ricardo Anaya recargará sus dichos en contra del PRI y de su contrincante tabasqueño. Propaganda previsible y harto aburrida. Sonsonete involuntario, por no suponer que es falta de imaginación.

En lo que corresponde al señoritingo Meade, nos repetirá hasta la náusea, que es la versión tecnócrata de la Madre Teresa de Calcuta y que, a pesar de pertenecer al grupo que ha quebrado al país y con ello causado la pobreza de millones, él no ‘tiene mancha’.

Para concluir, Maguito insistirá en decirnos que es una ‘candidata del pueblo’, cuando apenas medio año atrás, era una distinguida panista…joder.

¡Ah! pero el pasado viernes iniciamos una nueva fase.


________________________________________________________________________________________________________