EN ESTOS tiempos en que la crisis tiene envuelto al país, los viajes del presidente de la república, no son perjudiciales para la economía nacional, sino que al contrario, son necesarios para buscar recursos de donde sea, así como contribuir al establecimiento de nuevas políticas económicas, principalmente, en el rubro de las exportaciones petroleras.

Como se sabe, el precio del barril de la mezcla mexicana, ha caído tan bajo en sus precios que mejor sería regalarlo, si es que se requiere sacarlo de nuestras fuentes petrolíferas. Sin embargo, funcionarios de Petróleos Mexicanos, como de la misma Secretaría de Hacienda y Crédito Público, afirman que todavía existen ganancias con el precio actual, aunque todo parezca que no es así, pues el costo de extracción y todo el proceso que se requiere para exportarlo, puede ser tan alto que las mismas autoridades no se atreven en este momento a difundirlo.

De cualquier manera, lo que muchas veces se criticó del presidente de la república, en turno, cuando se programaba cualquier viaje al extranjero, la misma opinión pública considera que esta vez, es imprescindible que el mandatario nacional viaje a países como los Emiratos Árabes, para buscar estabilizar los precios del petróleo en una cantidad que sea redituable para nuestro país y mejorar las finanzas públicas, considerando que México, lamentablemente, vive con una economía petrolizada, ya que la mayoría de recursos que forman parte de su estabilidad económica, provienen, principalmente, de la explotación petrolera.

Se espera que el viaje presidencial, traiga buenas noticias a los mexicanos, porque la verdad de las cosas, es que en este momento, el país atraviesa por una situación económica difícil, que solamente se puede superar, cuando menos a corto plazo, con el repunte de los precios del petróleo, ya que como se ha comentado en diversas ocasiones, nuestro país no ha invertido en otras fuentes de ingresos y por lo tanto no se puede tener esperanzas de que la economía mexicana se recomponga, sino no es a través de precios del petróleo que le den oportunidad de obtener mayores utilidades.

Sin embargo, aparte, muy aparte de la baja del petróleo mexicano, existe la amenaza de la desaparición de fuentes primarias para la explotación petrolera, lo que hace que la extracción del petróleo se haga mucho más cara, debido a que ya no existen depósitos de este energético que sean fáciles de explotar, ya que se han terminado los existentes de menor aproximación a la superficie de la tierra, quedando, solamente, algunas de las reservas petroleras que se localizan a grandes profundidades, tanto en tierra como en el mar.

Las fuentes, es natural que se agoten, debido a que la explotación es constante y en grandes cantidades que llegan a sorprender a cualquier persona que no tenga conocimiento de lo que significa la explotación petrolera, que de saberlo no tan solo vendría la sorpresa, sino también la preocupación por una explotación inadecuada de nuestros recursos petroleros, además de generar el peligro de serias inundaciones, terremotos y todo aquello que tenga que ver directamente con la desestabilidad de las capas de tierra que tarde o temprano tienen que buscar su acomodamiento ante los terribles huecos que se van quedando con el saqueo del petróleo.

Pero volviendo al viaje presidencial por los países altamente productivos de petróleo, se comenta que hasta se había tardado, debido a que es necesario entablar conversaciones a fin de buscar estabilizar los precios, pues esa amenaza es cierta para un país, insistimos, que no tiene otras alternativas de fortalecimiento económico que no sea por los ingresos petroleros.

La riqueza petrolera, como se dijo en tiempos del ex presidente López Portillo, no es tan cierta, al grado de que a través de los recientes años, se ha venido informando de la escases de este producto, lo que aunado a los bajos precios del mismo, resulta ser una de las principales causas de la crisis económica, que como hemos referido, resulta ser una verdadera amenaza para la estabilidad económica del país.

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CON LA PLENA seguridad de que será Héctor Yunes Landa, el candidato del Partido Revolucionario Institucional, a la gubernatura del estado, el panorama político, se ha vuelto más estable.

Los mismos partidos políticos, oponentes al tricolor, han asumido una actitud de espera y sobre todo, de intranquilidad, debido a que las cosas no les salieron como esperaban.

Héctor Yunes Landa, es un candidato fuerte, políticamente hablando, cuya estructura política, se ha dicho siempre, es muy amplia y difícil de poder doblar en estos momentos que vive la entidad veracruzana.

Por eso, con tan solo haberse decidido, dentro del PRI, la candidatura a favor del político de Soledad de Doblado, la misma alianza política del PRD con el PAN, ha perdido su fuerza política desde ahora. Para el futuro candidato de esta unidad política, lo debe estar pensando seriamente y analizando la posibilidad de entrar en la contienda.

De esta manera, se terminaron los dimes y diretes, las descalificaciones y las acusaciones permanentes entre grupos que vieron, en esta alianza, una gran amenaza para el PRI, quedando, solamente, en estos momentos, los agravios que serán muy difíciles de superar.

De todos modos, la tranquilidad política, volvió a los escenarios de esta actividad en todo el Estado de Veracruz, esperando que sea Héctor Yunes Landa, quien se registre el domingo veinticuatro o lunes veinticinco, como candidato de unidad, es decir, que no haya un registro más para que la calma y sobre todo, la unidad comience a retornar al tricolor, después de que a ambos bandos se les olvidó la organización política, para adentrarse, solamente, en la persecución de sus propios intereses políticos y personales.

Héctor Yunes Landa, está listo. Se espera que el PRI, su partido, lo esté también para conjuntar fuerzas y conseguir una sola tarea que sea de todos, es decir, que se vuelva a la unidad política tan necesaria para enfrentar el proceso electoral del mes de junio. No hay más.

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ARMANDO MÉNDEZ de la Luz, es un político hecho a la medida de las circunstancias.

No es un personaje improvisado, pues su carrera por la vida pública de Veracruz, y del país, confirman que se trata de un hombre que se ha preparado para esta oportunidad política.

Es ya, como se sabe, el candidato oficial del Partido Movimiento Ciudadano, propiedad del ex gobernador Dante Delgado Rannauro, con quien ha trabajado permanentemente dentro de esta organización y que la han hecho crecer a base de esfuerzos conjuntos, por lo que la candidatura a la gubernatura de dos años, no resulta ser una sorpresa, pues solamente se confirma la buena relación política y amistosa entre los dos personajes ampliamente conocidos en el ámbito estatal.

Méndez de la Luz, ha sido secretario de Desarrollo Económico, en tiempos de Don Fernando Gutiérrez Barrios, también ha sido alcalde de Xalapa, Senador de la República, entre los principales cargos de elección popular, por lo que su quehacer público, está más que bastante comprobado.

Entrará en la lucha con el candidato del PRI, a quien conoce bien y respeta, pues no se sabe, hasta este momento, que Méndez de la Luz, haya externado opinión descalificadora del aspirante tricolor.

Eso es bueno, pues la lucha por la gubernatura del Estado, debe ser civilizada y se cree que ambos contendientes, saben bien lo que significa esta manera de actuar.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.

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