21 de Noviembre de 2024
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DESDE CATALUÑA - Amadeo Palliser Cifuentes
No sé ni Jota, no entiendo, no sé nada
2024-10-27 - 08:05

 


 


Amadeo Palliser Cifuentes / Barcelona 


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Viendo la situación. actual, y como independentista de base y simple ciudadano, ‘sólo sé que no sé nada’, como escribió Platón en su ‘Apología de Sócrates’; como intento explicar en este escrito.


En la mencionada obra, Sócrates (470 a.C. – 399 a.C.) explicó a Platón (427 a.C. – 347 a.C.), cómo se enfrentó en debates con los hombres considerados sabios; pero, tras esos debates, Sócrates se dio cuenta de que él sabia y entendía los problemas mejor que esos personajes; y no por conocer más verdades que ellos, si no por que él no fingía saber lo que no sabía, es decir ‘este hombre, por un lado, cree que sabe alguna cosa, mientras no sabe nada. De otra parte, yo, que igualmente no sé nada, tampoco creo saber alguna cosa’.


Es decir, Sócrates, con su famosa frase señalada, no estaba diciendo que no supiera nada, sinó que expresó que no se puede saber nada con absoluta certeza, incluso en los casos en los que se cree estar seguro de algo.


El efecto Dunning – Kruger (estudio realizado por los psicólogos Justin S. Kruger y David Dunning, y publicado en 1999 por la Universidad Cornell, Nueva York), resalta una desviación cognitiva, según la cual, los individuos con escasa habilidad o conocimiento, padecen un efecto de superioridad ilusorio, considerándose más inteligentes que las otras personas más preparadas, pues miden incorrectamente su habilidad por encima de la realidad.


Las conclusiones de ese estudio, señalaron que: ‘la incorrecta medida del incompetente se debe a un error sobre sí mismo, mientras que la mala medida ajena es debida a un error sobre los otros’.


Kruger y Dunning, tras investigar cierto número de estudios previos que tendían a sugerir que en diferentes habilidades como la comprensión lectora, conducción de vehículos de motor, y juegos como el ajedrez o el tenis, ‘la ignorancia frecuentemente proporciona más confianza que el conocimiento’ (como ya había dicho Charles Robert Darwin, 1809 – 1882)


Su hipótesis es que, en una habilidad típica que los humanos poseen en mayor o menor grado:



  • 1. Los individuos incompetentes tienden a sobreestimar su propia habilidad.

  • 2. Los individuos incompetentes son incapaces de reconocer la habilidad de los otros.

  • 3. Los individuos incompetentes son incapaces de reconocer su extrema insuficiencia.

  • 4. Si pueden ser entrenados para mejorar substancialmente su propio nivel de habilidad, estos individuos pueden reconocer y aceptar su falta de habilidades previas.


Ciertamente, todos sabemos el refrán que dice que ‘la ignorancia es atrevida’, y por eso, podemos leer muchos artículos y oír a tertulianos, que pontifican sobre todo, como si hablasen ‘ex cátedra’.


Y esto pasa en todos los temas, sobre los abusos sexuales, el fútbol, o el congreso que estos días está realizando el partido independentista de ‘Junts per Catalunya’ (con unos 6010 miembros), registrado como tal en el año 2018, que se conformó con Carles Puigdemont como presidente, Jordi Sánchez como secretario general y Jordi Turull, Elsa Artadi, Josep Rius y Anna Erra, como vicepresidentes.


Carles Puigdemont permaneció como president del partido en el período que va de agosto del 2020 a junio del 2022, y en ese momento consideró preferible dar mayor prioridad al Consell de la República, del que es presidente, y quiso darle una mayor transversalidad partidista.


En junio del 2022, Carles Puigdemont i Casamajor, fue sustituido, como presidente de Junts, por Laura Borràs i Castanyer, su candidata.


Y esta semana se está oficializando un nuevo relevo, ya que Carles Puigdemont ha decidido retomar la presidencia del partido, y Jordi Turull como secretario general. Y, Laura Borràs, derivada a la presidencia de una fundación del partido.


Pues bien, yo no entiendo estas jugadas, como tampoco entiendo que ahora, hayan preferido efectuar esas elecciones mediante listas cerradas, bloqueadas, para evitar posibles ‘castigos’ personales, por parte de la militancia, los seis mil mencionados.


Yo no soy militante de ningún partido, pero desde la creación de la coalición ‘Junts pel si’, les he ido votando, y, después, en diciembre del 2017, he seguido votando a Carles Puigdemont (Junts)


Quiero entender que los miembros de Junts, que tienen que votar, entienden perfectamente toda esa estrategia política; pero la verdad es que, desde fuera del partido, me falta mucha información, para entender las claves al respecto.


Y estoy convencido de que toda esta estrategia debería ser transparente para la ciudadanía, pues los votantes, en próximas elecciones, deberíamos poder digerir todos estos cambios.


Yo sigo confiando en la visión política de Puigdemont, pero no se trata de un tema de fe, deberíamos poder entender, racionalmente, todas estas jugadas, para salir del círculo vicioso señalado por el efecto Dunning – Kruger. Necesitamos y queremos saber.


En las ponencias del mencionado congreso de Junts, según los artículos de prensa al efecto, se señalan objetivos como:



  • Convertirse en la casa grande del independentismo,

  • Rebajar las hostilidades con ERC y tensionar las relaciones con Pedro Sánchez y Salvador Illa, del PSOE, para que cumplan con los acuerdos establecidos para sus respectivas investiduras,

  • Proponer que la sociedad civil impulse una ‘entidad paraguas’ en la que los partidos, organizaciones y entidades se agrupen en ‘forma confederativa’ para facilitar sinergias y estrategias institucionales compartidas, pues una iniciativa con una filosofía así, sería decisiva para la reconstrucción del movimiento independentista y encarar la lucha por el estado propio,

  • Etc.


Y todo esto me acaba de ofuscar más, y por eso me surgen muchas dudas:


¿No tenemos ya el Consell per la República, para esas funciones?


En lugar de inventos como la mencionada ‘entidad paraguas’, ¿no sería preferible colaborar con la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y con Òmnium Cultural, que son dos entidades sociales con amplia y contrastada experiencia?


Etc.,


Yo creo que deberíamos ir todos juntos, no crear nuevas capillitas con nuevos sacristanes y sanedrines.


Y mantenernos a la mayoría sin saber ni Jota (*), ignorantes de las estrategias, no me parece un buen camino, ya que la democracia ha de ser transparente y clara.


(*) este modismo alude a la letra iod hebrea y la iota griega, que son las letras más pequeñas de las 22 que usaban aquellos idiomas. Decir, pues, no saber ni jota equivale a reconocer no saber ni la letra más pequeña, es decir, ser un ignorante.


Y muchos queremos conocer, comprender y entender; no queremos ignorar y desconocer. Queremos conocer los entresijos y las luchas de poderes de las diferentes ‘familias’ que conforman Junts. Y una buena medida hubiera sido efectuar las votaciones con listas abiertas, y evitar la candidatura única, pues eso es, o debería ser, la base de una democracia plena.  


 


amadeopalliser@gmail.com


 


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