No hubo necesidad de darle muchas vueltas.
Dos encuentros de carácter privado, un desayuno público en La Estancia de Los Tecajetes –ahí estuvo de testigo de piedra el maestro Bielma– y fin del diferendo.
Lo del famoso video donde presuntamente Erick ofende al papá de “Pepe”, dejó de contar; la supuesta amenaza de “Pepe” de meterlo a la cárcel si llegaba a la gubernatura no existe más y la real o ficticia entrega de Erick a los brazos de Héctor, se esfumó.
José Francisco Yunes Zorrilla y Erick Lagos Hernández fumaron la pipa de la paz, dieron vuelta a la hoja.
Al segundo, como jefe del gabinete corresponderá, desde la Secretaría de Gobierno, conducir 2016 a buen destino en el marco del respeto al voto y de paso pondrá a disposición del candidato, de manera institucional, su capital político, que no es poco: una parte del sur del estado y a los partidos de oposición, excepción hecha por supuesto del PAN.
¿Habrá ruptura de Erick con Héctor Yunes Landa?
No. Ambos entienden las reglas del juego de poder en donde Erick ya no podrá ir de la mano del “gallo” de Osorio Chong, Beltrones y Alfredo del Mazo, porque su investidura se lo impide… y así se lo dijo en Martínez de la Torre en el marco de su informe, quedando ambos en cabal entendido.
No hay odios ocultos, no hay juegos de artificio, simple y llanamente Erick es congruente desde su posición y Héctor toma nota.
A “Pepe” tocará seguir sembrando por Veracruz un poco al amparo del gobierno de Javier Duarte, un mucho al amparo del centro, particularmente de Luis Videgaray que apostó en todo en su favor.
“Pepe” no es el candidato de Javier. “Pepe” es el candidato del centro.
Es el proyecto avalado por la cúpula presidencial que en momento dado, digamos hacia el último tercio del año próximo, tendrá que tomar las providencias debidas para no dejar ir del PRI a Héctor y ofertarle a cambio una embajada, una posición federal o una alianzas indestructible con “Pepe”, con quien por cierto lleva la fiesta en paz.
¿Qué va a suceder con el futuro de Erick?
Erick se ha manejado con destreza como segundo de Duarte. Hila fino. Es Fidel y habrá de confiar en un futuro promisorio no como diputado federal el año próximo –cuando menos ése es el escenario de hoy–, sino como senador de la república en pago a su lealtad y fundamentalmente porque será quien lleve de la mano a “Pepe” a la victoria en 2016.
Bueno, si antes no les gana la partida Héctor.
Tiempo al tiempo.

*Premio Nacional de Periodismo