Cuando me inicié en el diarismo hace más de tres décadas, vi con azoro que para entrar al medio había que hacer mucha fila, pasar muchas hambres y aguantar el peso y la ofensa del poder.
Al tiempo las cosas poco han cambiado.
Hace dos décadas serví a Veracruz desde la comunicación social oficial y me volví a encontrar con lo mismo: periodistas mal pagados y despreciados por el poder establecido.
Es innegable que muchos han sido los intentos por mejorar, pero ha sido punto más que imposible encontrar el equilibrio… y el dilema estriba en que el poder establecido no puede sostener a los periodistas como sus empleados, pero sí al menos mantenerlos en diálogo permanente.
Don Fernando decía que si no les vas a dar dinero porque no hay presupuesto que alcance, “al menos hay que tratarlos con dignidad”.
En su época –seguramente al igual que ahora– había de todo: desde los pasquineros hasta los jalasacos, pasando por verdaderas joyas de la congruencia periodística. Y no se podía hacer tabla rasa. Cada cual merecía un trato diferente, cada cual en su estilo, cada cual en su forma.
Porque de ello no se hace cultura.
A la vuelta del tiempo te sigues encontrando a los mismos patanes con diferente nombre. Son los mismos que se suben al ladrillo y se marean.
Hace unos días el diputado plurinominal Nino Baxin Mata dijo al periodista que lo cuestionaba: “Eres un jodido. Y estás jodido porque quieres”.
Baxin habló como lo que es: un hombre que viene de la basura –ahí empezó a trabajar– y que llega al cargo no por la voluntad de los electores, sino por el dedazo que da una diputación plurinominal.
A este diputadete Nino Baxin Mata, le molestó que un “jodido” reportero del sur de Veracruz le cuestionara sobre los ingresos reales que tiene como legislador, a lo que el diputado se mostró hostil y furioso.
Baxin, que más bien debería ser bacín, es el líder del sindicato de Limpia Pública de Veracruz. Fue el primero en llegar a un evento público en Cosoleacaque, adonde arribó a bordo de una camioneta de lujo, de ésas que son fuera de serie y que ni el gobernador del estado, Javier Duarte de Ochoa, emplea.
El líder sindical fue abordado por un grupo de reporteros y todo iba bien en la entrevista, sobre el tema de la basura, hasta que los comunicadores cuestionaron el salario y los méritos de los diputados de Veracruz para merecerlo.
Nino, que se hizo millonario explotando a los pepenadores del puerto de Veracruz, dijo en varias ocasiones que ganaba menos de 40 mil pesos, y que eran leyendas eso de que sus ganancias superaran los 100 mil pesos. Incluso que fueran más que las percibidas por el gobernador de Veracruz.
“Eso es mentira. Y reto aquí a que me lo compruebes. Tráeme al que lo dice”, decía el legislador al comunicador Enrique Quiroz García. El reportero le recordó que Renato Tronco, diputado por Coatzacoalcos, lo había declarado.
“Pues no es verdad. Lo reto a que lo demuestre”, dijo.
El comunicador le volvió a preguntar si se sentía merecedor de ese salario, ya que además es uno de los diputados locales del PRI más improductivos en la Legislatura local.
“Muchos sólo van a alzar la mano y a calentar el asiento“, fustigó.
“Pues no. Mi empleo es legislar y pensar y tomar decisiones. Eso es complicado”.
El comunicador le respondió diciendo que por eso el país estaba “jodido”, lo que enojó más a Nino.
“¿Jodido?…. jodido te veo yo a ti”, le devolvió.
Para esto, los otros periodistas se volcaron con preguntas al líder de la basura sobre su salario y trabajo legislativo, al grado de que lo hicieron estallar y les dijo que eran unos jodidos y muertos de hambre, centrando las críticas al colaborador del semanario Manifiesto de Acayucan.
“Estás jodido porque quieres, por gente como tú, que piensa así, el país está como está”, le dijo.
El periodista le respondió que no, que él era una persona que trabajaba, que desgastaba la suela de su zapato buzando el trabajo y el pan, en tanto que los legisladores se la pasaban en la comodidad del Congreso, a lo que Nino insistió: “Te veo jodido porque tú quieres. No pienses así. Cambia tu forma de pensar…”.
-¿Cuánto gana, diputado?
“50 mil pesos”.
-Dicen que gana más.
“Mentira”.
-¿Bueno, cuál es tu grado académico? ¿Qué estudiaste?
“Yo no fui a la escuela, aprendí de grande”, concluyó huyendo.
¿De grande?.. pues parece un enano con sus declaraciones
Ésos son los especímenes que nos representan. Eso es lo que piensa una parte de la clase política sobre los periodistas. En realidad el reportero, el monero, los fotógrafos y columnistas son una clase que incomoda al poder.
A este diputadete de bacín un día se le acabará el cargo, bajará del ladrillo y regresará a la basura de donde nunca debió haber salido, mientras los periodistas ahí estarán viendo pasar su cadáver.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo