Hoy se celebra el Día Internacional Contra el Cáncer, y precisamente es el cáncer de pulmón, uno de los padecimientos que más víctimas cobra en el mundo, sobre todo por el arraigado y nocivo hábito de fumar tabaco.
En México y en el mundo es una de las principales causas de mortalidad de la población, y lo más grave es que la población cada vez se inicia en esta adicción a una edad más temprana, pues según los reportes más recientes, en la actualidad los jovencitos fuman su primer cigarro a la edad de 10 años en promedio.
Pero no nada más se trata del daño que los fumadores empedernidos se causan a sí mismos, no, sino que el problema estriba en el daño colateral que suelen provocar a personas que no fuman pero que forzosamente tienen que inhalar el humo y sus contaminantes por tener cerca a estos adictos.
Ya en el pasado se tomaron cartas para revertir esta dañina situación, pero sólo Morelos, Tabasco y el Distrito Federal han implementado y mantienen vigentes medidas para contrarrestar el efecto negativo de este vicio.
El pasado mes de diciembre, el Congreso del estado de Veracruz aprobó la Ley de Protección a los no Fumadores, misma que establece que los lugares públicos cerrados deberán ser espacios libres de humo de tabaco.
Dicha ley entrará en vigor a partir del próximo 12 de marzo, por lo que tanto restaurantes, cafeterías, bares y demás lugares de convivencia cerrados deberán advertir que no se puede fumar en esos sitios, pues la ley prevé multar tanto a los fumadores como a los propietarios de esos lugares en caso de que se infrinja dicho mandato.
Y es que, de acuerdo con los datos que se tienen, de cada 10 personas que mueren por causa del tabaco, 2 más fallecen por inhalar el humo del cigarro ajeno.
Asimismo, se tiene evidencia de que una mujer no fumadora que está constantemente expuesta al humo del cigarro, tiene 3 veces más probabilidades de padecer cáncer de mama que una fumadora activa.
De ese tamaño es el riesgo y el daño que causa el hábito del cigarro, y por eso también cobra especial relevancia la puesta en marcha de la Ley de Protección a los no Fumadores.
Pero hay un dato más que viene a apuntalar esta acción, sobre todo en lo que respecta a esta ciudad de Xalapa.
Un estudio elaborado por la empresa internacional Air Quality Monitoring el pasado mes de noviembre, revela que en esta capital el aire que se respira tiene una grave concentración de sustancias tóxicas.
De acuerdo con el monitoreo efectuado por dicha empresa en 20 espacios de hospitalidad y convivencia , como restaurantes, bares y cafeterías, se detectó que en los que se fumaba el aire presentaba una contaminación promedio de 73 microgramos por metro cúbico, más de 7 veces del máximo nivel de contaminación del aire establecido como saludable.
De ahí la trascendencia y la urgencia de que se aplique y se respete la nueva ley, pero todavía más importante es que los fumadores creen conciencia del daño que se causan y el que causan a quienes, paradójicamente, no les hacen ningún daño.
Por lo demás, ya en anterior comentario se dijo aquí que quién sabe cómo estaba Xalapa con eso de la contaminación del aire, por la gran cantidad de automotores que hay, muchos de los cuales parecen verdaderos chacuacos.