Finalmente el cordero que llegará al matadero será Amadeo Flores Espinosa… y solamente él.
Los otros nombres que comenzaron a circular de posibles remociones, Gina Domínguez y Arturo Bermúdez Zurita, surgieron al calor de las ganas porque dejen el puesto ante el cúmulo de críticas que cada uno acumula en sus actividades.
Pero ninguno de los dos se irá, porque ambos forman parte del círculo inmediato de Javier Duarte, pero igualmente los dos tienen lazos y nexos más allá del poder gubernamental, que fueron precisamente los que propiciaron que construyeran su carrera política en Veracruz y que se les diese el cargo que ahora ocupan.
Felipe Amadeo Flores Espinosa, en cambio, siempre ha sido un grupo diferente y hasta contrario al real círculo de poder actual; buscó ser candidato a la gubernatura del estado todavía en la anterior elección, pero no se le hizo. Fue el único cargo que le faltó ocupar.
Ahora le inventan las ganas de quererse ir y para empujarlo aún más le recuerdan que su hijo Amadeo Flores Villalba es magistrado en el Tribunal Superior de Justicia sin cumplir con los requisitos y sin experiencia.
Por mientras Javier Duarte realmente se “balconeó” con quien ha querido que sea su procurador de justicia desde principio del sexenio, Luis Ángel Bravo Contreras, con quien salió al balcón de Palacio de Gobierno para que les tomasen fotografías y evidenciar que ahí estaban.
Luis Ángel Bravo está ligado con fuerza al gobernador Javier Duarte, con quien se conoce desde la juventud. Y esa cercanía es la que permitió que ocupase el cargo de consejero presidente del ahora anodino Instituto Veracruzano de Acceso a la Información.
Luis Ángel Bravo, para llegar al IVAI también se sirvió de su cercanía con el ahora secretario de Infraestructura y Obras Públicas, Gerardo Buganza Salmerón, quien lo avaló e impulsó para el puesto.
Luis Ángel Bravo es de Córdoba, donde fue presidente del Colegio de Abogados.
A principios del sexenio, al amparo de Gerardo Buganza, precisamente, buscó ser el procurador de Justicia del estado, pero se quedó en el camino por el fuerte compromiso que ya tenía Javier Duarte con Reynaldo Escobar, como nexo directo con la anterior administración gubernamental.
Para su arribo al IVAI también se apoyó en su amigo de la infancia, e igualmente cercano a Javier Duarte de Ochoa, Jaime Porres Fernández Cavada, para el cual realizó (¿o todavía lo hace?) trabajos de representación jurídica.
Jaime Porres, entre otros bienes, es propietario de la concesionaria Suzuki en Veracruz, desde la cual le ha vendido al gobierno de la autoprosperidad miles de unidades vehiculares, tanto que las patrullas de Tránsito del estado son de esa marca, así como los vehículos de otras instituciones del gobierno.
El empresario también tiene presencia como propietario de ingenios, actividad con la cual se liga a otra parte del llamado Grupo Córdoba. Y en todo eso estuvo inmiscuido Luis Ángel Bravo.
Pero además Luis Ángel Bravo es un hombre de armas tomar y en Córdoba dejó pendiente un caso por agresión verbal y física al agente del Ministerio Público, Rodolfo Díaz Ramírez.
Por cierto, como consejero del IVAI, ¿logró impunidad por esos actos?, ¿o ya logró el perdón?
Pero además su paso como agente del Ministerio Público en el sur del estado fue gris y dejó mucho qué desear. Por eso fue tan corto, menos de un año, en 2000.
Así que con esos antecedentes, ¿cómo se puede esperar que Luis Ángel Bravo garantice una actuación a favor de los veracruzanos, tanto en el IVAI como en la Procuraduría de Justicia?
Amadeo será el único sacrificado, pues Gina y Bermúdez se quedan a seguir haciendo lo mismo que hasta ahora y el nuevo procurador tampoco abonará nada favorable. Y cada uno ligado a Duarte y con nexos fuera del gobierno.
Las cosas seguirán igual porque no se implementarán medidas eficaces de combate a la delincuencia ni de seguridad pública.

¿A QUIÉN LE IMPORTAN LAS COMUNIDADES SEGURAS? Un proyecto que merece aplicarse, porque tiene implicaciones positivas por dondequiera que se le vea y que incluso propiciaría apoyos del extranjero, no ha sido atendido como debería ser por parte del gobierno del estado: el Programa de Certificación de Comunidades Seguras.
Arturo Mattiello Canales, veracruzano, es quien tiene a su cargo la promoción del programa en todo el país, el cual tiene el aval del Instituto Karolinska, que es la entidad encargada de escoger al premio Nobel de Medicina, cada año, y es un programa de intervención de la Organización Mundial de la Salud. No es una ocurrencia, sino un programa de visión mundial.
Tiene el programa porque es el presidente de la Asociación Nacional de Consejos de Participación Cívica, cargo que le dieron el año pasado en la Convención de Comunidades Seguras que hubo en México.
Y como veracruzano quiere que este se implemente en la mayor cantidad de municipios del estado, pero…
En el gobierno del estado la actitud es la misma que todo lo concerniente a la seguridad de los veracruzanos… Nada.
Hasta el momento el único funcionario que se ha preocupado por promover a las comunidades seguras es el secretario de Gobierno, Erick Lagos. Es el único que “con acciones nos demuestra su interés por promover las comunidades seguras en el territorio veracruzano”, dijo Arturo Mattiello.
Por lo pronto el único alcalde que ha tenido la visión política y social suficiente para atender el programa es el de Veracruz, Ramón Poo Gil, quien ya firmó la carta de intención correspondiente.
Otros presidentes municipales dijeron que el tema les interesa, pero “lo están estudiando”.

UPAV, UAM Y RENÉ AVILÉS. René Avilés Fabila es un escritor que también hace periodismo desde el lado cultural, pero que igualmente ha ocupado cargos públicos diversos.
Ha recibido numerosos premios, entre ellos los nacionales de Periodismo Cultural (1991), de Periodistas de México (1990-1992) y el de Narrativa Colima (1997) por “Los animales prodigiosos”, como mejor obra publicada.
Como literato tiene entre sus obras “El Evangelio según René Avilés Fabila”, “De Sirenas a sirenas”, “Bestiario de seres prodigiosos”, “Hacia el fin del mundo”,” La canción de Odette”, “Réquiem por un suicida”, “Tantadel, fantasías en carrusel”,” Todo el amor”, “El bosque de los prodigios”, entre otros.
A René Avilés le dará la UPAV un doctorado Honoris Causa “por sus aportaciones a las letras hispánicas y al pensamiento universal”, en un evento programado para el 22 de este mes en el auditorio Sebastián Lerdo de Tejada del Congreso de Veracruz, donde se espera la presencia de la escritora María Luisa “La China” Mendoza, y el doctor Javier Aranda Luna, quien entre sus ocupaciones tiene la de coordinador del segmento “En la opinión de…”, del noticiario con Joaquín López Dóriga.
Pero además el anuncio de la entrega lo hizo la Universidad Autónoma Metropolitana, con todo su aparato, de la cual René Avilés es profesor distinguido.
Así, pues, Guillermo Héctor Zúñiga Martínez sigue mostrando fuerza.

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